Economía

Critican los 69 cambios legales en los tributos regionales

Los economistas alertan de que las constantes reformas generan «inseguridad jurídica»

María José Portillo y Ramón Madrid. | C. E.

María José Portillo y Ramón Madrid. | C. E. / M.J.GIL

María José Gil

María José Gil

Los economistas critican los constantes cambios legislativos que han dado lugar en la Región a 69 modificaciones de la normativa tributaria en solo un año, mientras que en toda España las reformas introducidas se acercan al millar. Según se recoge en el informe ‘Panorama de la fiscalidad autonómica y foral 2024’, presentado ayer por la directora de la Cátedra de Hacienda Territorial de la UMU, María José Portillo, y el decano del Colegio de Economistas, Ramón Madrid, Murcia tiene el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (que se paga por la firma de escrituras notariales) más caro de todas las comunidades, mientras que también aplica uno de los tipos más altos del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales a los compradores de una segunda vivienda.

Según ha indicado el decano, comprar una casa de 150.000 euros en la Región cuesta 12.000 euros, mientras que en Madrid una finca del mismo precio pagaría 9.000 euros en Transmisiones Patrimoniales y en Andalucía tributaría 10.500. No obstante, Ramón Madrid ha recordado que en Cataluña se alcanzarían los 15.000 euros. La recaudación de este tributo ha subido de los 135,6 millones de 2016 a 175,2 en 2021, el último año recogido en el informe.

La aportación del impuesto que se paga por la firma de escrituras notariales rozaba los 70 millones, mientras que en el País Vasco este tributo apenas recauda 40,9 millones.

Por el contrario, Murcia es junto con Madrid la comunidad con una tributación «más ventajosa en Donaciones, dado que prácticamente no tributan los familiares cercanos» y también tienen bonificaciones los hermanos, sobrinos y tíos, entre otros parientes.

La práctica eliminación del Impuesto de Sucesiones y Donaciones ha hecho que la recaudación se haya reducido casi a la tercera parte entre 2016 y 2021, bajando de 65,1 millones a 25,6 millones.

La profesora María José Portillo asegura que las modificaciones «son una locura para el contribuyente»

De igual forma, la exención en el Impuesto de Patrimonio que pagan los ricos se ha elevado en Murcia hasta los 3,7 millones.

María José Portillo y Ramón Madrid defienden la necesidad de armonizar la legislación tributaria para evitar «la inseguridad jurídica» que producen los constantes cambios. «Es una locura para el contribuyente», asegura la profesora de la UMU.

Por su parte, el decano considera que «no es de recibo tener 69 cambios fiscales en la Región» y ha abogado por la reforma del sistema tributario para unificarlo.

De los 69 modificaciones de la normativa tributaria introducidos por el Gobierno regional, cinco corresponden Sucesiones y ocho a Donaciones, en los que se ha ampliado el abanico de parientes que pueden heredar o recibir propiedades donadas sin apenas tener que pagar.

El Impuesto de Transmisiones Patrimoniales ha registrado 24 modificaciones. En este tributo se ha subido de 35 a 40 años la edad de los jóvenes que pueden acogerse a los tipos impositivos más bajos al comprarse una casa. También se han ampliado a los 40 años las rebajas establecidas para los jóvenes que son propietarios de un negocio.

Otros 16 cambios corresponden a Actos Jurídicos Documentados, mientras que el resto se refieren a las nuevas deducciones en el tramo del IRPF autonómico, como la destinada a la conexión de Internet en municipios de menos de 15.000 habitantes.

Canon de Saneamiento e impuesto al bingo, los únicos tributos regionales

El Canon de Saneamiento y el impuesto a los premios del bingo son los únicos impuestos de carácter regional significativos, según apunta la directora de la Cátedra de Hacienda Territorial de la UMU, María José Portillo. 

También gravan los premios del bingo las comunidades de Asturias y Baleares. En 2024 las comunidades suman 59 impuestos en vigor.

 La experta recuerda que la Región tenía un impuesto de residuos que pagaban los ayuntamientos en función del volumen de basura que llevaban al vertedero, pero al crearse un tributo estatal ha desaparecido. Hasta abril de 2025 los ayuntamientos tienen de plazo para repercutirlo a los vecinos en el recibo de la basura. Una parte de los consistorios lo ha empezado a cargar ya en enero de este año, aunque todavía hay un elevado número de municipios que se lo pagan a la Comunidad pero no lo repercuten a los vecinos.  

Andalucía ha establecido también un impuesto por la utilización de las bolsas de plástico y por las tierras infrautilizadas. Cataluña grava las bebidas azucaradas y Cataluña, Baleares y Extremadura cobran por las estancias turísticas.

Portillo también planteó que en muchos casos los tributos creados por las comunidades llegan a ser anulados incluso antes de entrar en vigor .