El alcalde de Alcantarilla quiere las instalaciones de la ITV para uso cultural

El alcalde de Alcantarilla, Joaquín Buendía, ha pedido a la Comunidad Autónoma las instalaciones que ocupa la ITV pública situada en este municipio, que el Ejecutivo regional ha decidido cerrar para "convertirlas en un espacio cultural y de ocio".

La Consejería de Medio Ambiente, a la que está adscrita en este momento la Dirección General de Industria, ha confirmado el cierre de la única estación de inspección de vehículos pública que ha mantenido la Administración regional tras la privatización de las ITV, que dio lugar a la apertura de decenas de estaciones y ha permitido pasar de las 8 que había en 2017 a las 43 actuales.

La Consejería atribuye la decisión de cerrar la estación de Alcantarilla al descenso de las inspecciones de vehículos que se ha producido en los últimos años, mientras que los trabajadores sostienen que la caída de la actividad se debe a la falta de mecánicos encargados de realizar las inspecciones y al abandono premeditado por parte del Ejecutivo para justificar el cierre.

Tras conocerse los planes de la Comunidad, el alcalde de Alcantarilla ha anunciado a través de un comunicado de prensa su deseo de convertir las instalaciones de la ITV en "un espacio cultural y de ocio, una vez que acabe el servicio que presta actualmente".

El regidor ha explicado que quiere "aprovechar este espacio, cuya ubicación es inmejorable, con acceso directo desde la autovía y desde la Avenida Cristo Yacente, a solo cinco minutos del centro de la ciudad, y con unas dimensiones que permiten desarrollar multitud de proyectos culturales para la ciudad de Alcantarilla".

Recuerda que el recinto tiene "una superficie 10.000 metros cuadrados de planta" y que "el inmueble quedará libre una vez que la Consejería de Medio Ambiente finalice el servicio de inspección técnica de vehículos".