La Policía accede a la ‘zona cero’ para hallar el origen del fuego

Los agentes de la Policía Científica y Judicial han podido acceder en la tarde de este lunes al interior de la discoteca La Fonda Milagros, local donde se originó el fatal incedio que acabó con la vida de 13 personas en la madrugada del pasado domingo. Los Bomberos de Murcia han logrado a lo largo del día de hoy apuntalar la estructura de los restos del edificio calcinado y asegurar la zona para comenzar la investigación policial.

A primeras horas de esta mañana hasta seis efectivos de este cuerpo han tenido que extinguir varios conatos de incendio que se han producido en el local. Esto ha provocado un retraso en el inicio de las labores de inspección de la Policía Nacional, que ha trasladado hasta Murcia a varias unidades de agentes especializados en incendios y sucesos con múltiples víctimas desde la Comisaría General de Policía Científica de Madrid.

Teatre y Fonda Milagros llevaban abriendo sin licencia desde marzo de 2022

Por tanto, ahora comienza una labor complicada que pretende determinar el origen del fuego, ya que hasta este lunes los propietarios de ambas discotecas incendidadas (Teatre y La Fonda) negaban que el fuego comenzaran en sus instalaciones. Las primeras pesquisas apuntan a un cortocircuito en un foco de iluminación en el local La Fonda, en cuya primera planta se localizaron a la totalidad de las víctimas de este siniestro.

Esto lleva a pensar a los investigadores que el origen podría estar en esta sala de música, pero testigos del incendio han remarcado tanto el domingo como el lunes junto a la discoteca que las llamas se iniciaron en Teatre y llegaron hasta el local contiguo por el conducto de ventilación. Las primeras tareas para comprobar el estado general de la estructura, muy dañada por el fuego, se llevaron a cabo con drones de la Policía Local de Murcia. Los bomberos se retiraron a media tarde tras permanecer un retén de seis efectivos todo el lunes.

Familiares y amigos, pegados a los cordones policiales

Los cordones policiales amenecían este lunes rodeados de medios de comunicación y de la presencia de varios familiares y amigos de las posibles víctimas. Todos eran personas muy cercanas a la familia de Eric Hernández, nicaragüense de 30 años que celebraba precisamente su cumpleaños en la discoteca el pasado domingo de madrugada. Su fallecimiento, junto al de su madre Marta Hernández, su novia Orfilia Landón y su hermano Sergio, no es oficial, pero ayer ya todos empezaron a asumir el trágico final de esta familia.

Algunos de los que trataban de saber algo más en las inmediaciones de las discotecas fueron invitados al cumpleaños, pero por diversas causas acabaran esquivando milagrosamente una noche trágica en el polígono de la ciudad de Murcia.

Juan, trabajador de la zona y habitual de la discoteca más afectada, describe el local como un "laberinto" de reservados en una sala que "fue partida en dos por un tabique". Teatre separó un tercio de la nave para crea Fonda Milagros, y ello pese a que no tuvieron el permiso municipal. Los materiales de madera y plástico que recubrían la mayor parte de la discoteca fueron el combustible perfecto para la propagación del fuego.