La Región incorpora una técnica pionera para tratar el dolor crónico de hernias

El Hospital Rafael Méndez de Lorca ha sido el primero en aplicarla a dos pacientes de su área de salud

Equipo del Rafael Méndez que ha aplicado la nueva técnica.

Equipo del Rafael Méndez que ha aplicado la nueva técnica. / L. O.

Ana García

Ana García

El tratamiento del dolor crónico está incorporando importantes avances en los últimos años y la Región de Murcia no se queda atrás. Precisamente, el Servicio Murciano de Salud (SMS) acaba de incorporar una técnica pionera para el tratamiento del dolor de las hernias discales y lumbares, según informan desde la Consejería de Salud.

El primer centro en llevarla a cabo ha sido el Hospital Rafael Méndez de Lorca, a través del servicio de Anestesia, Reanimación y Terapéutica del Dolor, que ha implantado un nuevo procedimiento innovador y mínimamente invasivo para solucionar el dolor crónico en protrusiones y hernias, tanto discales como lumbares.  

Se trata de una actividad pionera en la Región de Murcia que consiste en una inyección percutánea, guiada por imagen en quirófano, de gel viscoelástico. Este control por imagen ayuda en la precisión, rapidez, efectividad y en la seguridad del paciente durante la intervención. 

Esta técnica mejora la calidad de vida de aquellos pacientes cuya patología no puede solucionarse con cirugía habitual o tratamientos convencionales para paliar el dolor. Hasta el momento, ya se ha realizado con éxito a dos pacientes del Área III de Salud.  

Además, esta operación aporta una notable mejoría y rapidez en la recuperación de la persona que es intervenida, que solo precisa ingreso ambulatorio o de corta estancia (inferior a 48 horas) y no necesita rehabilitación post quirúrgica. También conlleva una mayor eficiencia del gasto sanitario, social y familiar, ya que disminuye los tiempos de baja laboral.

Por otra parte, es una técnica menos agresiva y más viable para los pacientes frágiles, personas mayores con mayor número de comorbilidades, con patologías que dificultan la técnica convencional, entre otros.  

Este tipo de intervencionismo quirúrgico para el control del dolor está indicado en pacientes muy seleccionados que refieren dolor crónico complejo de más de seis meses de evolución, que no mejoran con terapias físicas ni farmacológicas adecuadas, o que ya han sido operados sin un resultado óptimo, entre otros requisitos.  

Las dos primeras intervenciones se llevaron a cabo el pasado 22 de mayo a dos pacientes que no respondían a analgesia habitual mayor, incluida morfina, y que imposibilitaba su vida normal.