El plan estratégico de Enagás para el periodo 2022-2030 está basado en dos grandes pilares: la seguridad de suministro energético -especialmente de España y Europa-y la descarbonización, con vistas a ser una compañía climáticamente neutra en 2040 y a contribuir al proceso de transición energética global.

Foto de la planta de Cartagena. | ENAGÁS

Para reducir a cero su huella de carbono, lleva años promoviendo medidas que le han permitido reducir ya un 54 % sus emisiones respecto a 2014. Como objetivos intermedios hasta 2040, tiene previsto reducir sus emisiones en un 65 % para 2026 y un 74 % en 2040. Objetivos alineados con el escenario de incremento de temperatura de 1,5ºC.

50 medidas anuales

«Tenemos en marcha un plan de más de 50 medidas anuales de eficiencia energética que nos van a permitir una paulatina descarbonización de nuestras infraestructuras», apuntan desde Enagás. Entre ellas, la electrificación de turbocompresores; el uso de biometano para consumo propio en lugar de gas natural; la reducción de emisiones de metano y la mejora de su cuantificación.

Además, para contribuir al proceso de descarbonización global, ha extendido su compromiso a toda su cadena de valor -sociedades participadas y proveedores, entre otros-, con objetivos concretos de reducción de emisiones, para las emisiones de alcance 3. «La meta es que desciendan un 25 % en 2030 y un 50 % en 2040 con respecto a 2021», apuntan.

Para este fin, la compañía trabaja en el impulso de los gases renovables -especialmente hidrógeno verde y biometano- con proyectos que permitan la paulatina descarbonización de toda la cadena de valor del gas natural. También promueve el GNL (gas natural licuado) para el transporte, principalmente marítimo o ferroviario, y la reducción de emisiones de sus participadas y proveedores.

Desde 2017 todas las plantas de GNL de Enagás, incluida la que tiene en Cartagena, son neutras en carbono.

Cartagena: clave para la garantía de suministro

En el actual contexto, sus seis terminales de regasificación en España están siendo esenciales para asegurar el suministro energético. Hasta septiembre han recibido gas de 17 países diferentes, lo que pone de manifiesto la diversificación de los orígenes.

Solo en la planta de Cartagena han descargado 53 barcos en lo que va de año -23 más que el año pasado en estas mismas fechas-, que proceden de países como Estados Unidos, México, Argelia y Nigeria. En los tanques de esta instalación, las reservas de gas natural acumuladas son del 82 % de su capacidad, lo que supone un elevado nivel de aprovisionamiento.

Esta terminal se encuentra conectada con la red de gasoductos de la Península y permite que el GNL que llega en los barcos metaneros se distribuya -ya en estado gaseoso- a nivel nacional y también a otros países europeos que lo necesitan.

Los tres almacenamientos subterráneos que hay en nuestro país, también propiedad de Enagás, se encuentran al 93 % de llenado de su capacidad de reserva, lo que sitúa a España como uno de los países mejor preparados para afrontar este invierno.