La Opinión de Murcia

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Economía

Las cuotas de las comunidades de vecinos subirán un 20 por ciento

El Colegio de Administradores de Fincas de la Región recomienda la instalación de placas fotovoltaicas ante la crisis energética y exige al Gobierno la equiparación de la factura con la que tienen las unidades familiares

Dos operarios instalan placas solares en la azotea den una comunidad. ep

Se acerca el invierno y con él las peores previsiones económicas. Las comunidades de propietarios miran con recelo este futuro inmediato porque son muy conscientes de que el panorama internacional tendrá su reflejo en sus cuotas mensuales. La crisis en el mercado del gas, la subida de precios general, el coste de la energía en particular o el incremento de la cuota en los contratos de limpieza y mantenimiento han llevado a los administradores de fincas a dar la voz de alarma. Desde el Consejo General de Administradores de Fincas aseguran que con este contexto las cuotas comunitarias subirán un 20, 30 o un 40 por ciento. Desde el Colegio regional son más prudentes y estiman un encarecimiento de las cuotas entre el 15 y el 20 por ciento de media, aunque admiten que por tamaño y servicios, algunas comunidades sí podrían alcanzar el 30 por ciento.

«Esta situación la estamos notando desde finales del año 2020, y hoy el coste de la luz se ha triplicado en las comunidades de propietarios, y cualquier servicio que esté relacionado con la energía eléctrica se encarece», explica Antonio Ruiz, responsable de Comunicación del Colegio de Administradores de Fincas de la Región de Murcia, que pone de ejemplo a las comunidades que tienen piscina: «La depuradora tiene que estar encendida unas horas, por normativa, y esas horas cuestan el triple que antes».

Además, la subida del gasoil hace que el coste de los oficios que requieren un desplazamiento aumente, (transportistas, casas de limpieza, desinsectación…). «Todo esto repercute en el coste final de tu comunidad», recuerda este administrador.

Además, desde el Colegio destacan que en las comunidades de propietarios es muy difícil recortar servicios o prescindir de ellos. «No puedes decidir que usas menos el ascensor, o desconectar las bombas de agua potable o la puerta del garaje, se siguen utilizando igual; en las comunidades no se pagan servicios o productos superfluos sino esenciales», indica Ruiz.

Aquellas comunidades que tienen un sistema de calefacción centralizada sufren especialmente el incremento de los costes del gas. Según este alto cargo del Colegio, «ese incremento hace que tengamos que actualizar las cuotas de mantenimiento que se estaban pagando con normalidad en los últimos años».

Por todo ello, desde el Colegio exigen medidas contundentes, entre otras cosas, porque la capacidad de ahorrar costes es limitada. «Tú puedes cambiar las bombillas a LED, poner sensores para que se enciendan y apaguen las luces solo cuando detecten movimiento, en fin, puedes optimizar y abaratar cosas, pero llega un momento en que no puedes reducir más», explica Antonio Ruiz.

La última opción -sostiene- que queda para minimizar la factura de la luz es instalar en aquellos edificios donde sea posible placas fotovoltaicas «para reducir el consumo que tienes». El Colegio está percibiendo un gran aumento de la demanda de información y de solicitud de presupuestos.

En este sentido, recuerda que «ahora mismo hay muchas líneas de subvenciones abiertas para financiar este tipo de proyectos, por lo que los propietarios saben que no van a pagar el cien por cien del coste total». Además, pide tener en cuenta que estos sistemas tienen una duración de cerca de 25 años, «y creo que la sociedad está hoy mucho más informada, y lo que antes era solo una cuestión casi de concienciación ecológica es ahora una necesidad imperiosa para reducir la factura de la luz».

La demanda de placas solares es discreta entre las comunidades

A la hora de calcular el presupuesto de la instalación hay que tener en cuenta tanto el coste como el periodo de amortización varía según diversas variables, entre las que se encuentran el tamaño de la superficie utilizable, la calidad de los componentes, o la dificultad de la propia instalación. El IDAE pone un ejemplo tipo de proyecto: un edificio de cinco plantas con cinco viviendas en cada una, con unos 470 metros cuadrados en total, aparcamiento y tres locales comerciales en el bajo, donde se instalan 50,49 kilovatios pico (kWp) en la azotea, tendría un coste aproximado de 76.000 euros.

«Este proyecto -explican desde el IDAE- es subvencionable por unos 25.000 euros, y además muchos podrán acogerse a rebajas del IBI según el municipio». Muchas ciudades de toda España hacen descuento a sus vecinos en el Impuesto sobre los Bienes Inmuebles si ponen en marcha una instalación solar fotovoltaica para autoconsumo en su casa o bloque; esos descuentos en el IBI pueden llegar a ser de hasta el 60 por ciento y pueden prolongarse hasta 20 años. En el ejemplo que aporta el IDAE, una inversión dividida según cuota de participación implicaría un coste de 2.900 euros por vecino y 3.900 euros por cada comercio.

El tamaño importa

Destaca este administrador de fincas colegiado que el tamaño de algunas azoteas permite aprovechar el excedente que generan. «Si tienes la capacidad de generar mucha más energía de la que necesita la comunidad, puedes repartir esa energía entre todos los vecinos y acabas generando un doble ahorro: un ahorro en los servicios comunes y otro en la factura de cada vivienda».

Hay otras vías de ahorro posibles. Ruiz recuerda que hay un proyecto del Gobierno de España con el que, a partir de octubre, se reducirá el IVA del gas del 21 al 5 por ciento, «pero solo lo va a hacer en aquellos contratos que son individuales, por lo que aquellas comunidades de propietarios que tienen un contrato general para la calefacción central, con caldera comunitaria, mantendrá el IVA del 21 por ciento». Los administradores de fincas consideran que esto es «incongruente», ya que esa medida iba a destinada a aliviar la economía de las unidades familiares.

Cabe destacar aquí que el Consejo General de Colegios de Administradores de Fincas (Cgcafe) también ha pedido el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (Idae) que se extienda la tarifa regulada de gas de todas las comunidades con calefacción central.

Detectan un leve aumento de la morosidad y temen que se dispare

Ante la situación de crisis de precios actual, el Colegio de Administradores de Fincas en Murcia ha detectado una desviación importante entre los presupuestos que estaban aprobados de las comunidades y los gastos reales, sobre todo en los capítulos de energía eléctrica y en aquellos donde tiene una incidencia el aumento de los precios en el gas y la luz. Por todo ello, explica Antonio Ruiz, «nos vemos obligados a hacer juntas extraordinarias para actualizar esas cuotas y ponerlas en consonancia con lo que conocemos hoy en día». Con respecto a la morosidad, Ruiz asegura que se ha observado ya un leve aumento, que podría ir a más, pero destaca que aquí no solo afecta las subidas de las cuotas, sino que «ha subido todo, la cesta de la compra o el combustible del coche». Otra manera de soportar el envite del encarecimiento de los productos y servicios podría ser apostar por las líneas de ayudas europeas para la rehabilitación de edificios y viviendas para mejorar la eficiencia energética del inmueble, pero desde el Colegio de Administradores no creen que sea algo que en este momento esté en manos de muchos propietarios. «Las ayudas están bien, pero solo algunas comunidades podrán abordar esas obras, que requieren una gran inversión inicial», sostienen desde el Colegio, que recuerda que las ayudas se pagan tras haberse realizado las obras.

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