La Opinión de Murcia

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Ganadería

La sequía golpea a la ganadería extensiva de la Región con falta de pastos hasta el verano

La ausencia de lluvia desde hace meses termina con la alimentación en campo abierto para cabras y ovejas, problema al que se suma la subida de precios en los piensos por la guerra en Ucrania

Un rebaño de ovejas pastorea en el Campo de Cartagena. | L.O.

El campo mira al cielo, otra vez. La falta de lluvias en España está generando una importante situación de sequía en algunas cuencas como la del Guadalquivir o Guadiana, pero la del Segura no se queda muy atrás tras meses sin recibir importantes precipitaciones que ‘rieguen’ los campos murcianos. Más allá de lo perjudicial que puede resultar esto para la agricultura, con pérdidas que se avecinan en las producciones de secano y temor al recorte en las aportaciones para el regadío, el sector primario centra su mirada en la ganadería extensiva.

No hay pastos, y si no hay pastos los ganaderos de caprino y ovino, las cabañas ganaderas que se alimentan en campo abierto, deben suplir la alimentación de los animales con pienso y forraje, materia prima cuyo precio se encuentro disparado y más ahora con la invasión de Ucrania por parte de Rusia. «La situación es gravísima», señala José Miguel Marín, presidente de COAG Murcia, «no hay pastos sobre el terreno y los ganaderos llevan con esta situación desde los meses de septiembre y octubre».

El sector ve este año «con mala perspectiva» ante la sequía meteorológica y conciben este mes de marzo como un punto de inflexión: si llueve ahora no habría pasto hasta dentro de dos meses pero no de hacerlo «el verano será un desastre» y se rompería «el ciclo agronómico, que es lo peor que nos puede pasar».

El Ministerio reúne a organizaciones y autonomías en torno a la Mesa de la Sequía para buscar soluciones

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En la zona del Noroeste, zona eminentemente de secano, «si no caen precipitaciones ahora, en verano no va a quedar alimentación para el ganado extensivo», alerta Alfonso Galera, vicepresidente de Asaja. En el Campo de Cartagena, el ovino o caprino pueden aprovechar todavía los restos de plantaciones como el brócoli cuando termina la recolección, o el triturado de los restos de la planta de alcachofa, pero el temor sigue latente.

El Ministerio de Agricultura reúne mañana a las organizaciones agrarias y comunidades autónomas en torno a la Mesa de la Sequía. El sector agrícola busca lograr medidas que frenen los efectos tanto de la falta de precipitaciones como de la escalada de precios en las materias primas.

A la subida de precios a la que ha tenido que hacer frente un agricultor en materia de alimentación para el ganado se le tiene que sumar la guerra de Rusia contra Ucrania, ambos países considerados el granero de Europa. El suministro peligra y si se opta por una alternativa de alimentación para el ganado extensivo dada la falta de pastos, «el precio de esos productos también se encarecerá porque subirá la demanda», alerta Galera.

Secano y apicultura, en peligro

Los cultivos herbáceos de secano son los primeros que ven llegar el peligro de la sequía en la Región, a los que sigue producciones de los almendros, el olivar o los viñedos, que se pueden ver «gravemente» afectados, subraya el dirigente de COAG. La Agencia Estatal de Meteorología prevé una descarga de lluvias a partir de este jueves, cuando la Región reciba la visita de una DANA que puede dejar precipitaciones hasta el fin de semana. «Estaremos atentos a estas lluvias, que creemos que pueden ser testimoniales», refleja Marín, que añade la apicultura a los sectores afectados por la ausencia de precipitaciones.

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