Un hombre herido y otro en aislamiento. Es el resultado de la riña a golpes que tenía lugar anoche en la cárcel de Campos del Río, la más grande de la Región, indicaron fuentes sindicales. El suceso tenía lugar en una galería de una de los módulos más peligrosos de esta penitenciaría.

La agresión (por motivos que no han trascendido, aunque se sospecha que tiene que ver con el trapicheo de sustancias) se produjo cuando sube a las celdas por la noche, tras la cena, para proceder al cierre. En un momento dado, dos reos se enzarzaron entre ellos y comenzaron a pegarse. La rápida actuación de los funcionarios presentes evitó que la pelea fuese a más, señalaron testigos, que recordaron que hay un solo trabajador para controlar 36 celdas.

Como castigo, uno de los internos era mandado a aislamiento. Es decir, se endurecen sus condiciones. Por ejemplo, pasa a un régimen donde tiene prohibido fumar y salir al patio. Pero esta medida no dura más de tres días, señalan las fuentes. El otro recluso, el que se llevó la peor parte, acabó en la enfermería, aunque sus lesiones no revisten gravedad y no precisó ser trasladado a un hospital.

Se trata de dos sujetos (uno español y otro marroquí) que cuentan en su haber con numerosos delitos. Son multireincidentes. En la riña no llegaron a emplear armas: sólo los puños. Uno de ellos cuenta con un largo historial de altercados entre rejas.

En abril, otro interno de Campos del Río acababa en la enfermería tras ser objeto de una brutal paliza por parte de un compañero. Días después, dos presos acababan en el hospital tras verse involucrados en una brutal pelea en la que hubo palos y cuchillas.

La prisión de Campos del Río, emplazada en el Paraje Los Charcos, fue levantada en 2011. La superficie construida es de 106.976,40 metros cuadrados. Los funcionarios que allí trabajan han de lidiar día a día, aseguran, con una violencia verbal que, en demasiadas ocasiones, se convierte en física. Destacan que hace falta más personal para poder controlar la situación, y, tras distintas agresiones, temen que un día pase una desgracia.

El secretario de Organización Nacional de Acaip, Fran Mauri, insiste en que en las cárceles "estamos en unas condiciones lamentables", por lo que volvió a pedir una mesa de negocación con carácter urgente.

Desde Acaip vienen reclamando desde hace mucho tiempo mejoras de sus condiciones laborales que afectan, entre otros aspectos, a la vulnerable seguridad en la que desempeñan su labor. Esta situación, que se produce no solo en Campos del Río, sino también en otras cárceles del país, la vienen denunciando desde hace tiempo ante la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias y ante el Ministerio del Interior. Entre sus reivindicaciones se encuentran la dotación de más personal, el reconocimiento de estos funcionarios como agentes de la autoridad y las condiciones salariales, ya que critican que sean el único colectivo del Ministerio del Interior que no ha visto mejorado su salario.