Investigadores del hospital Virgen de la Arrixaca, dirigidos por el jefe de la Unidad de Medicina Tropical, Manuel Segovia, han participado en el descubrimiento de los marcadores que permitirán controlar la enfermedad de Chagas. Los responsables del estudio recuerdan que se trata de una dolencia con síntomas ´silenciosos´ que pueden ser confundidos con una gripe y que conlleva que el paciente sufra alteraciones cardíacas, digestivas y neurológicas sin que se percate del motivo, ya que muchas personas no saben que llevan hasta 25 años padeciendo Chagas porque es complicado de diagnosticar.

El estudio multicéntrico desarrollado por miembros del RICET –Red de Investigación en Enfermedades Tropicales– ha permitido descubrir los biomarcadores que permiten conocer y controlar los síntomas, si el paciente está tomando la medicación y si los fármacos resultan eficaces. Aspectos que hasta ahora eran imposible de conocer. Así, en los casos en los que se diagnosticaba el médico se le planteaba la duda sobre si tratar o no el paciente, ya que no se conocía en qué grado le podía estas afectando la enfermedad, a lo que se une que los medicamentos utilizados para Chagas son tóxicos y producen alergias.

La enfermedad se transmite por las heces de un chinche llamado vinchuca que habita en las grietas de paredes y tejados en viviendas de adobe y paja, así como de madre a hijo durante el embarazo. También se contrae la enfermedad a través de transfusiones de sangre o trasplante de órganos de personas infestadas. Aunque se trata de una enfermedad endémica del continente americano, en España hay contabilizado más de 30.000 casos.