Orgullo

Vox Cartagena exige la retirada de la bandera LGTBI de todas las instalaciones municipales

La formación ha presentado un ruego ante el Pleno del Ayuntamiento, argumentando que se trata de una enseña "no oficial"

Izado de la bandera LGTBI en el Palacio Consistorial hace unos días.

Izado de la bandera LGTBI en el Palacio Consistorial hace unos días. / Iván Urquízar

La Opinión

La Opinión

El Grupo Municipal de Vox presentó este miércoles un ruego al Pleno del Ayuntamiento de Cartagena en el que solicita que el Consistorio retire la bandera del Orgullo LGTBI de todos sus balcones y mástiles. La formación hace referencia para su petición la vigente Ley 39/1981, de 28 de octubre, por la que se regula el uso de la bandera de España y el de otras banderas y enseñas y, en su cumplimiento, la Sentencia 1163/2020 de fecha 26 de mayo de 2020, del Tribunal Supremo, no resulta compatible con el marco constitucional y legal vigente, y en particular, con el deber de objetividad y neutralidad de las Administraciones Públicas, la utilización, incluso ocasional, de banderas no oficiales en el exterior de los edificios y espacios públicos.

Desde el Grupo Municipal de Vox han afirmado que: “la enseña nacional, que ondea a la entrada de cualquier edificio público, tal y como establece el artículo 4.1 de la Constitución, representa a toda la comunidad nacional y a la igualdad entre todos los españoles, sin distinción por sexo, raza, religión, opinión política u orientación sexual. Contra estos valores de concordia e igualdad entre españoles, ciertos partidos, lobbies e instituciones tratan de imponer una división artificial de la sociedad en colectivos con necesidades y problemas excluyentes, a los que victimizan para después erigirse como sus defensores frente a una supuesta mayoría opresora. Esta dialéctica perversa, que pretende instaurar el enfrentamiento entre compatriotas según su sexo, su orientación sexual o el territorio en el que vivan, lleva a la creación de símbolos con el objetivo de lanzarlos como arma arrojadiza contra otros”.

Asimismo, desde Vox señalan que "dicha exhibición supone una privatización del espacio público de uso común". Según destacan, "la colocación de estos símbolos supone una acción excluyente y electoralista que vulnera los principios de objetividad y neutralidad institucional, tal y como han determinado los Tribunales de Justicia en diversas sentencias (STSJ de Cataluña Sala de lo Contencioso Administrativo 579/2018)".

Para la formación verde, “la bandera LGTBI carece de reconocimiento legal válido como símbolo oficial y, por tanto, sólo puede ser calificada de parcial y electoralista en cuanto que, asociada a una parte de los ciudadanos identificados con dicha bandera no oficial, no es representativa de la mayoría de los ciudadanos que no pertenecen a ese colectivo o no se alinean con dicha opción. En este caso, ni siquiera representa a todas las personas homosexuales, muchas de las cuales rechazan ser colectivizadas y utilizadas como arma política y reivindican que los poderes públicos aborden sus verdaderos problemas, que normalmente comparten con el resto de sus compatriotas, sin importar su orientación sexual”.

En opinión de Vox, "no se trata, por tanto, de una cuestión de interés general para los ciudadanos, sino de un puñado de 'lobbies' y grupos de presión que buscan ganar poder y recibir subvenciones costa del enfrentamiento social. En todos los partidos políticos hay personas de distintas tendencias sexuales, homosexuales o heterosexuales, pero la condición sexual no debería tener ninguna relación con la toma de decisiones políticas".

La formación liderada por Diego Salinas considera que "cualquier español tiene el derecho de portar o exhibir en su balcón pancartas o banderas con las que se identifique, dentro del marco del ordenamiento jurídico". Sin embargo, apuntan, "las instalaciones del Ayuntamiento de Cartagena son un espacio público, por lo que son las banderas institucionales las que deben ser expuestas, empezando por la enseña nacional, que es la que mejor representa al pueblo español, su unidad y pluralidad".

Por todo lo expuesto, el Grupo Municipal de Voxha solicitado al Ayuntamiento de Cartagena que "cumpla la Ley de Banderas y la doctrina del Tribunal Supremo, respetando la neutralidad de las Administraciones Públicas mediante la no utilización, incluso ocasional, de banderas no oficiales en el exterior de los edificios y espacios públicos". El partido ha querido recordar también que "el artículo noveno de la mencionada ley establece que las autoridades corregirán en el acto las infracciones de esta Ley, restableciendo la legalidad que haya sido conculcada”. Po lo tanto, a su juicio, "se debe proceder a la retirada inmediata de la simbología LGTBI del espacio público de uso común en cualquiera de sus formatos (banderas, pancartas, pintura, luces, etc.) en aras a los mencionados principios de objetividad y neutralidad institucional, y que únicamente sean utilizados aquellos símbolos oficiales que representan a la totalidad de la ciudadanía".