No quieren que se hable de punto de inflexión, pero lo cierto es que en poco más de un mes, de acuerdo con el pacto firmado en 2019, se producirá el relevo en la Alcaldía de Cartagena y el bastón de mando pasará a manos de la popular Noelia Arroyo. No será traumático. Hay sintonía entre ella y su predecesora, Ana Belén Castejón. Las alcaldesas de la ciudad portuaria cuentan en qué punto se encuentra el municipio y hacen balance de la primera mitad del mandato.

Llegamos a la mitad del mandato. Estos dos años han sido especialmente duros.

Ana Belén Castejón: Ha sido un primer tramo muy complicado, con varias DANA y una pandemia, pero se ha visto la fortaleza de este Gobierno de coalición y de nuestro pacto. Hemos hecho frente a la covid, siempre desde la unidad y el consenso y tomando decisiones colegiadas entre los tres socios de Gobierno.

Noelia Arroyo: Después de dos años hemos conseguido el objetivo por el que hicimos el pacto, que era dar estabilidad, ser útiles a los cartageneros, centrarnos en resolver los problemas del municipio y diseñar un programa de Gobierno en el que estamos de acuerdo en todo. La situación tan delicada que estamos viviendo nos ha unido mucho más. Somos tres partidos que gobiernan como un único equipo, un único programa, mucha generosidad, mucho respeto y mucha lealtad.

Castejón: "Ahora sé que Cartagena va a tener muy pronto una gran alcaldesa"

El PSOE no supo entender esa necesidad de unión con el PP y la expulsaron. ¿Ha sido difícil gobernar sin ese respaldo, señora Castejón?

A. B. C: Duele. Tengo 41 años y llevo militando más de veinte años en el PSOE, la mitad de mi vida, sumado a mi época en las Juventudes Socialistas. Entiendo la política como un servicio público y, hoy, sigo pensando que hice lo correcto. Quizás me equivoqué en la forma, en no consultar a mi partido, pero ya pedí perdón. Me quedo con lo bueno y eso será un capítulo agridulce de mi periplo por la política.

N. A: Me gustaría añadir que creo que fue muy injusto lo que pasó. En política, al final, cada uno se retrata y queda claro quién está por su interés particular y quién está por el interés general. Fue un ajuste de cuentas del PSOE de Diego Conesa. En contra de lo que he visto que ella ha vivido, yo sí tuve el apoyo de mi partido para votarla a ella.

¿Y sin partido, qué va a hacer dentro de dos años, alcaldesa?

A. B. C.: Mirar atrás con orgullo por lo conseguido en Cartagena y por la amistad que me llevo. Cuando acabe esta legislatura, llevaré dieciséis años en la política municipal, no he tenido una legislatura tranquila hasta esta.

¿Dejará la política, entonces?

N. A: La local.

A. B. C: En política nunca se sabe. Es el arte de lo posible y de lo imposible. Mire lo que pasó hace unas semanas en la Asamblea Regional. Yo quiero saborear este momento, no quiero pensar en 2023.

Supongo que con tanta crisis medioambiental, por las fuertes lluvias, y sanitaria, por la covid-19, les quedará mucho programa por desarrollar.

A. B. C: El otro día repasamos con nuestros concejales nuestro acuerdo programático y vimos que llevamos más del 70% cumplido, así que afronto el relevo con tranquilidad y sosiego.

¿Temen que su pacto refuerce a José López de cara a 2023?

A. B. C: Ante el populismo, gestión; ante el jaleo, educación; ante el despropósito de actuaciones impropias, saber estar y altura de miras. Nuestro legado será la gestión. En plena pandemia, hemos sacado la mayor inversión de obra pública de la última década y nunca antes había habido una relación con tanta lealtad y trabajo compartido entre el Puerto y el Ayuntamiento. Estoy convencida de que los cartageneros van a valorarlo.

Entonces confía en sus posibilidades para la reelección, señora Arroyo.

N. A: Yo creo que el populismo y la demagogia siempre venden más al principio, pero no tiene rentabilidad más allá del corto plazo. Hemos diseñado una alternativa sólida.

A. B. C: Nosotras somos como esa lluvia fina, que va calando poco a poco. Así es este proyecto. En 2023 la sociedad verá un trabajo de cuatro años.

Arroyo: "Estoy presente en todas las decisiones que toma el PP y siempre he recibido más de lo que he pedido"

¿Tiene ganas de ser alcaldesa, señora Arroyo?

N. A: El relevo se produce de manera natural, que nadie espere un antes y un después. Hay una fecha señalada, pero las competencias de la alcaldesa las mantendrá durante toda la legislatura y yo mantendré las mías. Durante estos dos años hemos atendido las crisis, lo extraordinario, pero sin dejar de atender lo ordinario. Eso lo permite la distribución del trabajo y la confianza. Sumar multiplica resultados. No le voy a negar que para mí ser alcaldesa de Cartagena va a ser lo más importante que haga en mi vida, pero también creo que, con el paso del tiempo, quizás me sienta más orgullosa de haber hecho historia en Cartagena. Hemos estado a la altura de las circunstancias, liderando el dispositivo de emergencia social, atendiendo a las familias en todo momento y ayudado a nuestros sectores económicos más castigados.

A. B. C: Ha sido muy fácil trabajar y hemos estado al pie del cañón en la crisis. Ahora sé que Cartagena va a tener muy pronto una gran alcaldesa.

¿Qué retos tienen por delante estos dos años?

N. A: Los retos son de cuatro años, empezaron con el primer presupuesto y terminarán con el último. Con todo, mi mayor deseo para los próximos dos es que estemos todos vacunados, que podamos recuperar la normalidad y que lleguen muchos fondos europeos. Los ayuntamientos necesitamos esa financiación. Gran parte de lo que no hemos conseguido para Cartagena en años anteriores ha sido porque no hemos sabido defenderlo. Hemos desaprovechado oportunidades y eso es, precisamente, lo que evita la estabilidad.

Se acerca la temporada estival y el turismo es esencial para Cartagena. ¿Están preparadas para volver a impulsar el sector, si la pandemia lo permite?

A. B. C: Hemos aprovechado la pandemia para trabajar en silencio y engrasar la maquinaria. No solo cuidamos nuestra oferta, sino que la vamos a aumentar. Tenemos el Museo del Barrio del Foro Romano, que pronto será inaugurado, las obras del museo de la casa natal de Isaac Peral ya están en marcha y seguimos trabajando en un plan estratégico de promoción.

N. A: También estamos en contacto con Yolanda Muñoz, presidenta de la Autoridad Portuaria de Cartagena, para que, cuando Salud Pública nos dé su visto bueno, vuelvan los cruceros a la ciudad. El turismo ha perdido un año, pero el Ayuntamiento no. Vamos a ser el primer municipio de la Región en tener un plan estratégico covid de turismo sostenible.

¿Y el Mar Menor está preparado? Días después de que inauguraran los balnearios, aparecieron en el fango.

N. A: Se produjo un fenómeno natural, conocido como las secas de marzo, por el que baja la marea temporalmente, y este año ha sido más fuerte. Al Ministerio para al Transición Ecológica le corresponde retirar los fangos y los secos, tal y como lo contempla la Ley de Costas. Como no es nuestra competencia, aunque sí nuestro problema, le requerimos al Gobierno central que actuase. Y como se mantiene la inacción, hemos pedido permiso para que nos dejen hacer.

¿Se ha notado el traslado de la Consejería de Turismo?

A. B. C: Por supuesto. Y desde que está Marcos Ortuño, la actividad en la Consejería ha seguido a un ritmo frenético, con reuniones constantes con el sector. Aparte, un consejero que ha sido alcalde y que entiende el municipalismo es muy importante para Cartagena.

N. A: La Consejería está más viva que nunca. De hecho, los próximos días comienzan aquí las mesas de trabajo del Plan Estratégico de Turismo y se ha incrementado la partida de promoción turística para promocionar Cartagena con la marca Costa Cálida como la capital del turismo en la Región. Por otra parte, por primera vez, se ha apoyado institucionalmente a los tres principales equipos de la ciudad con el patrocinio de la marca Costa Cálida. La Consejería está aquí, pero lo importante es que se ha aumentado la inversión, que es lo que quiere el sector.

Y están preparando la candidatura de Cartagena a Patrimonio de la Humanidad.

A. B. C: Estamos en el proceso de conseguir a los mejores embajadores, hay un equipo técnico de una talla inmejorable y es un trabajo a medio y largo plazo donde Cartagena se tiene que posicionar. Somos una ciudad con más de tres mil años de historia, con la huella de tantas civilizaciones que han dejado su legado en el rico patrimonio que tenemos. Falta ordenarlo y presentarlo.

N. A: Lo que está definido es el objeto, que es el sistema defensivo (baterías, castillos, fortalezas) y el Puerto. Para conseguirlo necesitamos dejar a los expertos trabajar, sin entorpecer. No debemos hablar de más los políticos porque la Unesco tiene en cuenta todo.

¿Qué opinión tienen sobre lo ocurrido con la moción de censura en la Región y el Gobierno con expulsados?

A. B. C: Lo único que puedo decir es que voy a seguir exigiendo a la administración autonómica, gobierne quien gobierne.

N. A: No era el momento ni había motivos. Solo respondía a intereses personales, por eso hubo una parte de Cs que consideró que tenía que hacer aquello para lo que se comprometió en 2019. Cuando algo no funciona es lícito cambiarlo, pero si se estaba trabajando en buena dirección, no se puede hacer una moción de censura a traición. La prioridad para cualquier gobierno a día de hoy es la gestión de la crisis.

Vicealcaldesa, no la incluyeron en el nuevo organigrama del PP. ¿Cómo le sentó?

N. A: Estoy presente en todas las decisiones que toma mi partido y siempre he recibido más de lo que he pedido. Creo que, por las circunstancias políticas del pacto que yo tengo aquí, es bueno que siga trabajando desde el Gobierno de Cartagena por encima de intereses personales e ideológicos.