Son tan solo dos personas, pero tienen atemorizados y cansados a muchos vecinos del centro de El Palmar. Se trata de una pareja que llegó a la pedanía sobre el pasado mes de abril, cuando alquilaron un piso. Los continuos robos por la zona comenzaron a molestar a los vecinos, pero con el paso del tiempo todos apuntaban a esta pareja, la cual ha llegado a ser detenida y ha pasado varios días en el calabozo pero, «finalmente un juez los deja salir».

Quien mejor los conoce es B. L. F., ya que ha sido la última vecina que ha tenido que ir a comisaría en varias ocasiones para denunciarlos, pero ya no puede más. «Vivimos con miedo, pensando que en cualquier momento pueden entrar en nuestras casas», asegura esta vecina de El Palmar, quien recuerda que antes de que le tocara a su madre, hubo otros robos. Sin embargo, su primera denuncia llegó al volver de la playa el pasado mes de septiembre. «Volvimos de pasar unos días en la playa y al llegar a casa de mi madre nos encontramos con la casa toda revuelta y destrozada», asegura.

«A mí me pareció raro que no se llevaran casi nada, pero lo denunciamos», explica B. L. F.. La sorpresa llegó cuando los ladrones decidieron volver al día siguiente y, mientras la madre de esta vecina se encontraba en la planta baja de su casa, el hombre al que todos habían visto merodeando las casas de la zona estaba «en el piso de arriba llevándose todo». «Me llamaron mis vecinos que fuera corriendo porque habían pillado a este hombre saltando por el tejado de casa de mi madre».

En aquel momento no portaba ningún objeto robado porque, según explica esta vecina, «hizo varios viajes, pero se llevó de todo: televisión, Thermomix, ordenador, cámara de fotos y muchas herramientas que tenía mi padre», asegura B. L. F. Tras las denuncias pertinentes y pasar por el Juzgado, «él y su mujer ya estaban en la calle el viernes», comenta con cierta desesperación, ya que asegura que el pasado domingo otro vecino «lo pilló en su casa, donde ya había sacado las cosas al jardín para ir llevándoselas».

«No podemos vivir así, pensando que en cualquier momento van a entrar en nuestras casas», asegura esta mujer de El Palmar, quien, tras acudir a la Delegación del Gobierno, ha decidido, junto a otros vecinos de la zona, comenzar una recogida de firmas para lograr que esta pareja se marche de la pedanía.

"No pagan el alquiler"

  • Asimismo, los vecinos mantienen que «no solo son los robos», ya que se trata de una pareja que «no sabe vivir de otra manera». «No pagan el alquiler y la dueña los ha denunciado también, además de que han vendido todo lo que había dentro de ese piso», aseguran. Por otro lado, explican que, además se sienten vigilados, ya que «siempre están merodeando por nuestras casas y llamamos a la Policía, pero los agentes nos dicen que no pueden hacer nada».

«Es mucha la impotencia. No poder vivir tranquilos en tu propio pueblo», asegura B. L. F., quien asegura que le parece «indignante» que «nunca hemos tenido problemas con nadie del pueblo, ni con los vecinos de Los Rosales, que están aquí al lado, y que ahora vengan estas dos personas a tener atemorizado a todo el mundo no se puede consentir». Y es que la mayoría de robos se han producido en casas de planta baja y no en pisos.

En ellas vive por lo general gente mayor, que «no se moviliza como nosotros», afirma B. L. F., quien no ha querido dar su nombre, al igual que otros vecinos, ante el temor de que haya represalias por parte de la pareja a la que no quieren en la pedanía. «Esperemos que se vayan, porque los mayores tienen miedo», afirma esta vecina, quien destaca que su madre «aunque lleva una semana sin dormir, se acuesta con ropa y no con el pijama por si tiene que salir corriendo». Lo que desean es que «no haya más robos, vivir tranquilos y que esta pareja se vaya de aquí, porque no podemos estar siempre con esta tensión en nuestras casas».