Investigadores del departamento de Ecología e Hidrología de la Universidad de Murcia (UMU) han coordinado la elaboración del primer Atlas y Libro Rojo de los Coleópteros Acuáticos de la España peninsular, que acaba de publicar el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) y que incluye una nueva especie de escarabajo, descubierta durante la elaboración del atlas.

Se trata del Stictonectes abellani, nombrado así en honor a uno de los investigadores de Murcia que han participado en esta publicación, Pedro Abellán, según explica el coordinador del proyecto Andrés Millán.

«Fue una sorpresa encontrar esta especie, porque forma parte de un grupo de insectos muy conocidos y es raro encontrar especies nuevas; también porque apareció en zonas que ya habían sido estudiadas con anterioridad», explica Millán. Esta nueva especie se localiza en el sur de Portugal y sur de Extremadura y en el oeste de Andalucía, añade.

El atlas, que ya está en la web del Ministerio, en www.magrama.gob.es/es/biodiversidad/publicaciones/ pbl_ieet_invert_atlas_ coleópteros_acuat.aspx., recoge un total de 486 especies, de las cuales 120 son endémicas de la Península.

El investigador, responsable del grupo de Ecología Acuática de la UMU, destacó que es la primera vez que se realiza una obra en la que los protagonistas son un grupo de insectos. «Lo normal es que se hagan sobre vertebrados o especies amenazadas», apunta Millán.

De estas especies, 150 están presentes en la Región de Murcia y dos de ellas están en peligro de extinción: la Ochthebius glaber y la Ochthebius montesi. «Estos escarabajos viven en ambientes salinos, como las ramblas, y ha sido la actividad agrícola, que ´dulcifica´ las aguas, la que ha provocado su desaparición», indica el ecólogo, añadiendo que, de hecho, el Ochthebius montesi, ya no se encuentra en la Región.

El volumen, en el que también han participado investigadores del Museo de Ciencias Naturales del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y del Instituto de Biología Evolutiva de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, se ha elaborado a partir de una recopilación de una base de datos de más de 62.000 registros. Comenzó a elaborarse a instancias del Ministerio en 2011 y ha supuesto una inversión de 70.000 euros.

Cada especie va acompañada de una fotografía y sus principales características. Así como su localización en el mapa de la Península Ibérica.

Para las especies endémicas, además, se incluye un modelo de distribución potencial, distinta a la actual.

El Atlas supone un gran hito para el conocimiento de estos insectos y ayudará a identificar especies amenazadas en los humedales, lo que, a su vez, contribuirá a la conservación de sus ecosistemas.

«Estas especies, al vivir en ambientes húmedos, están sometidos contínuamente a la presión humana, por lo que su estudio nos da una idea del estado de conservación de los distintos medios acuáticos, como humedales, parques naturales, etc.», comenta el investigador murciano.

Considera, además, que pueden ser una «buena herramienta» para mejorar la gestión de la biodiversidad de los distintos ecosistemas.