José Orihuela Calatayud, Pepe, como todos le llaman, es desde este martes al mediodía rector de la Universidad de Murcia. En un acto multitudinario en la facultad de Economía y Empresa y con todo el ceremonial que la institución atesora tras casi un siglo de vida, él y su equipo tomaron posesión de los cargos que ocuparán durante los próximos cuatro años. Hasta aquí llegaron, según dijo en su discurso el flamante rector, después de vencer en las elecciones «con la fuerza de nuestra pasión por gobernar desde un cambio profundo».

Y lo hará desde con el compromiso de ser «el rector de todos, que nadie lo ponga en duda» y con la firme idea de promover «una revolución pacífica» para conseguir modificar «el modus operandi de las instituciones públicas». Como herramienta para lograr todo eso contará no solo con su programa, sino también con algunas de las ideas presentes en los programas electorales de las tres candidaturas derrotadas: las de José María Martínez Selva, Juan María Vázquez y Francisco de Asís Martínez. Solo este último no asistió al acto.

Orihuela elogió el trabajo de su antecesor, José Antonio Cobacho, y su equipo por el esfuerzo dedicado a la institución durante ocho años y, a pesar de las diferencias de criterio en la gestión que quedaron patentes en la campaña, el ya nuevo rector dejó claro que no pretende llegar al rectorado «a represaliar a nadie, ni a pedir cuentas de la gestión anterior. Si se hubiera cometido algún error, nuestra misión es perdonar».

A lo largo de las catorce páginas de su discurso, Orihuela desgranó sus doce primeros compromisos ante la comunidad universitaria. Más transparencia, menos horas docentes para el profesorado, elaborar un código ético, empezar a utilizar el software libre Linux para no pagar licencias a multinacionales por los recursos informáticos... y especialmente negociar con la Comunidad para que vuelva a haber un plan de financiación plurianual como hasta 2011 para poder sacar a la Universidad de la situación de «asfixia económica» actual. El rector afirmó que «con el pretexto de la tolerancia, hemos sido demasiado indulgentes» con los recortes salariales y de empleo, una situación con la que el nuevo equipo quiere acabar. Fue un mensaje claro de las intenciones de reivindicación con las que llega al rectorado, aunque pidió al presidente de la Comunidad, Alberto Garre, «que no se deje confundir con algunos mensajes desafortunados que han venido circulando en el periodo de traspaso de competencias».

Orihuela, probablemente, se refería sin nombrarlo a los comentarios sobre que ´irá a quemar San Esteban´ si hace falta para conseguir más dinero. El rector se comprometió a negociar aunque, advirtió, lo hará, «pero no con monedas de subordinación, sino con el poder de la razón y la justicia». A cambio, el rector se comprometió a ofrecer transparencia con los gastos y rendición de cuentas a la sociedad y a toda la comunidad universitaria, que ayer aplaudió con energía su entusiasmo. Comienza una nueva etapa en la Universidad.

También prometieron su cargo los integrantes del equipo rectoral que son su secretario, Santiago Álvarez Carreño; el rector de Comunicación y Cultura, Antonio Gómez; de Coordinación e Internacionalización, Bernardo Cascales; de Estudiantes, Calidad e Igualdad, Miguel Ángel Pérez Sánchez; de Formación e Innovación, Pedro Miralles; de Infraestructuras y Sostenibilidad, José María Abellán; de Investigación, Juan García Fernández; de Planificación de Enseñanzas, José Manuel Mira; de Profesorado, José Ángel López Jiménez, y de Transferencia y Emprendimiento, Francisca Alonso.

Compromisos:

Integrar los tres programas electorales que no vencieron para crear un único proyecto.

Los exrectores conformarán el Comité Asesor de Excelencia (CAE)

Las agendas diarias de todo el equipo rectoral serán accesibles a través de Internet

Ser la primera universidad en entregar a los estudiantes el Suplemento Europeo al Título en formato digital

Gobernar de forma proactiva, pensando en el largo plazo y los cambios estructurales

Las celebraciones del centenario serán la piedra angular del primer año

Exigir a la Comunidad un plan de financiación plurianual

Negociar, pero no con subordinación, sino con razón y justicia. Ofreciendo rendición de cuentas

Software libre para el PAS, que utilizará Linux

Abrir un debate para elaborar un código ético de la Universidad de Murcia

Liderar junto a la UPCT los esfuerzos por la formación continua de los ciudadanos de la Región

Volver a ocho horas de clase semanales como carga lectiva para cualquier profesor