El 6 de agosto es una fecha marcada por el infortunio en la pedanía lorquina de Zarcilla de Ramos, donde ese día era recordado entre los vecinos por el terremoto de 4,5 grados que sacudió la población en 2002 y ahora por el voraz incendio forestal, aún activo, que ha arrasado más de 300 hectáreas en la sierra de El Almirez.

El seísmo se produjo hace 13 años, el 6 de agosto de 2002, a las 8 horas y 16 minutos, alcanzó una magnitud de 4,5 grados en la escala de Richter y se sintió en Murcia, Albacete, Ciudad Real, Jaén y Madrid.

Ese seísmo no solo afectó a la pedanía de Zarcilla de Ramos, sino a toda la zona norte del municipio y el epicentro se situó a 2,5 kilómetros al noroeste de la pedanía de La Paca.

Tuvo 223 réplicas y, aunque no causó heridos, dejó daños en la zona valorados en 523.242 euros y se registraron 571 reclamaciones de vecinos por desperfectos en sus viviendas y negocios, de las cuales 138 correspondieron a Zarcilla de Ramos.

Solo tres años después, el 29 de enero de 2005, la misma zona se vio sacudida por un terremoto aún más violento, de 4,7 grados de magnitud en la escala de Richter que causó daños muy cuantiosos en casi 900 viviendas de Zarcilla y La Paca.

El incendio de este 6 de agosto en la sierra del Almirez, el principal pulmón verde del municipio de Lorca, fue causado por un rayo y ya ha devastado 300 hectáreas de pinares, sabinares y carrascales de este espacio de titularidad municipal que está declarado como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y Zona de Especial Protección de las Aves (ZEPA).

En las labores de extinción del fuego participan de 200 profesionales, 73 vehículos y tres medios aéreos.