La buena relación que mantienen unos padres separados, que siempre saben guardar las formas ante sus hijos, manteniendo delante de ellos una relación incluso cordial, ha sido una de las circunstancias tenidas en cuenta por la Audiencia Provincial de Murcia para fijar la custodia compartida, según se recoge en una sentencia.

La sentencia estima en parte el recurso que el padre presentó contra la sentencia de un Juzgado de Primera Instancia de San Javier que acordó, entre otras medidas definitivas en el proceso de separación, atribuir la guarda y custodia de los niños a la madre, con un régimen de visitas a favor del otro progenitor. Al analizar el recurso de apelación presentado por este último, la sala comenta que incluso la sentencia que ahora se ver revocada parcialmente reconoce que tanto el padre como la madre «se encuentran plenamente facultados para el cuidado de sus hijos e involucrados en su vida cotidiana».

El tribunal se hace eco del contenido de un informe psicológico elaborado sobre los padres, en el que se recoge que «se ha podido comprobar que delante de los menores son capaces de mantener una relación cordial, comunicándose por mensaje aquellas cuestiones importantes referentes a los niños».