José Antonio Sánchez López es miembro del Grupo de Espeleología y Montaña de Cieza (GREM) y en los dos últimos rescates que se han realizado en La Atalaya, una montaña que se conoce palmo a palmo, los bomberos han reclamado su ayuda, sabedores de su gran experiencia a pesar de su juventud.

Cuando el domingo pasado conoció que dos chicos, primos hermanos de 14 y 16 años de edad, habían quedado atrapados en una zona de muy difícil acceso del monte de La Atalaya, muy cerca del pico de la emblemática montaña ciezana, José Antonio no tardó en ponerse a disposición de los profesionales. Éstos recogieron el guante y Sánchez no se demoró en encumbrase.

«El papel que yo desempeñé fue realizar el montaje de una instalación que me permitiera asegurar de forma provisional, pero segura, primero a uno de los niños (el que más cerca se encontraba) y así ahorrar tiempo para llegar al segundo, que estaba demasiado agotado. Uno de ellos se encontraba a una altura de unos 75 metros y el otro a unos 90 aproximadamente», comentaba a este periódico el joven espeleólogo.

Pero la operación no fue nada fácil, José Antonio explica que, hasta que fueron asegurados, los dos menores «estuvieron expuestos a un riesgo altísimo, puesto que no podían descansar sobre ninguna superficie y el esfuerzo que tenían que realizar para sostenerse a la roca era muy grande. Además, la temperatura bajaba por momentos y su ropa no era la apropiada».

«Para todos fueron momentos muy difíciles, pues pensábamos que no llegaríamos a ellos a tiempo, estaban ya mucho tiempo en la pared y la instalación que había que realizar para llegar a ellos fue muy laboriosa y extensa», señala Sánchez, cuya agudeza, sin embargo, propició un feliz desenlace.

«Cuando conseguí tenerlos anclados se procedió a su descenso, que se realizó en dos tramos debido a las características de la pared».

«Para mí fue una experiencia muy dura, porque los niños se encontraban en una situación tan complicada que pensaba que no llegaría a alcanzarles a tiempo», concluye el escalador ciezano José Antonio Sánchez López.