­Los regantes del Heredamiento de Molina de Segura han ganado parte de la batalla contra el Sindicato de Riegos ya que, según afirman, la Confederación Hidrográfica del Segura ha declarado nula la constitución de la junta directiva del Heredamiento -tras unas elecciones el pasado mes de mayo que ellos consideraron de dudosa legalidad- y, además, deja sin efecto la derrama o contribución especial de 300 euros por tahúlla que fue aprobada en marzo «sin el consentimiento de la asamblea general». Con esta decisión de la CHS, «sendas resoluciones dan la razón a los regantes en dos de los recursos presentados sobre las irregularidades en la gestión de la Junta directiva del Heredamiento», indican en una nota de prensa.

Aún así, señalan que tras ser declarada la nulidad de la constitución del Sindicato de Riegos, «éste ha seguido manteniendo reuniones y adoptando acuerdos, que igualmente han sido recurridos ante la Confederación».

Plan de regadíos

Asimismo, los regantes han exigido a la empresa Acuamed la paralización de las obras del Plan de Modernización de Regadíos a raíz de la resolución de Confederación en la que se admite que «las derramas para su ejecución son de obligado abono por los comuneros, siempre y cuando los acuerdos en virtud de los cuales se determinan hayan sido correctamente adoptados por el órgano competente», que no es otro que el Sindicato de Riegos, que ahora «carece de la validez legal necesaria para abordar la ejecución de estas actuaciones».