Deseado Flores, presidente del consejo de administración del FC Cartagena, está pendiente del correo ordinario estos últimos días. Y es que aguarda un certificado de la Agencia Tributaria que informe que la entidad albinegra está al día en el pago de sus impuestos. Este documento, junto con el de la Seguridad Social que indique lo mismo, serán presentados de forma inmediata en el ayuntamiento de Cartagena, para que los gobernantes municipales puedan comprobar de primera mano que -a excepción de los pagos que deben hacer y que están sometidos a concurso de acreedores-, el club albinegro no debe nada a las instituciones públicas. De esta manera, podrían volver a entrar en la rueda de las subvenciones que convoca cada año el Ayuntamiento y de la que salieron en 2012 por no pagar sus impuestos.
Además, Flores va a pedir un esfuerzo al alcalde, José López, para que la ayuda sea mayor a los 100.000 euros concedidos en 2012. Los propietarios quieren resarcirse de esa pérdida de dinero que ha dejado de entrar en las tres campañas anteriores, con un incremento considerable en la ayuda para el año 2016.
Entienden desde el FC Cartagena que José López es muy receptivo con la entidad albinegra y que está muy satisfecho por cómo Deseado Flores y Paco Belmonte están gestionando la entidad en los últimos meses, por lo que el momento es el idóneo para arrancar un compromiso lo más beneficioso para sus intereses.
No obstante, este propósito es tan sólo una declaración de intenciones por parte de los dirigentes actuales de la entidad cartagenerista, ya que el concejal de Deportes Ricardo Segado ha manifestado en alguna ocasión que las ayudas para la próxima temporada se regirán por unos criterios diferentes a los que se manejaban hasta ahora. Decía la pasada semana Segado que pretende convocar a un grupo de técnicos para que decida cómo, cuánto y a quién se le debe dar el dinero aprobado para subvenciones.
A la búsqueda de dinero
Flores anda metido de lleno desde el pasado verano en la búsqueda de dinero para intentar cubrir los casi 800.000 euros que el administrador concursal ha autorizado esta temporada. Con casi el 70% cubierto, gracias al dinero que ha llegado de los abonos, el dirigente cartagenerista trata de involucrar a parte del tejido empresarial de la ciudad portuaria para que eche un cable en forma de patrocinios y esponsorizaciones.
Además de los acuerdos puntuales ya anunciados, entre otros con Coca Cola, el club ha conseguido que Huertas Motor también se una a su proyecto. Además, hay otras dos firmas, que han estado muy involucradas en la esponsorización de equipos de la ciudad, que están a punto de firmar un acuerdo con el FC Cartagena. Al igual que hay dos empresas cerveceras que andan negociando su colaboración con la entidad albinegra para los próximos años.
Por otro lado está el asunto de la publicidad en la camiseta. Desde el club están trabajando en varios frentes para que la misma pueda lucir en poco tiempo la publicidad de una firma o una institución de la ciudad portuaria. Los dueños del FC Cartagena afirman que las negociaciones resultan lentas pero que pueden resolverse en las próximas semanas y añaden que una de las opciones seguro que será del agrado de los aficionados cartageneros, que se verán plenamente identificados con la misma.
