El primer Triatlón Cross Ciudad de Jumilla, la única prueba del calendario regional que se disputa en el mes de agosto, se convirtió ayer en un desafío a las altas temperaturas y a la montaña, ya que el sector de ciclismo no transcurrió por carretera, como es habitual en los triatlones clásicos, sino por sendas y pistas, que los participantes afrontaron en bicicleta de montaña.

La cita, que contó con casi setenta participantes, de los que sólo 57 lograron entrar en meta, fue de las más duras que se celebran anualmente en la Región. El tiempo invertido por el ganador (más de dos horas), además de las altas temperaturas, convirtieron a la cita jumillana en una prueba de extrema dureza.

El Triatlón Cross de Jumilla, que se celebró coincidiendo con las fiestas del vino de la localidad, constó de un sector inicial de mil metros de natación es piscina. Posteriormente, los triatletas tuvieron que afrontar 32 kilómetros en bicicleta de montaña a través de pistas y sendas, para finalizar con siete kilómetros de carrera a pie.

El triunfador fue Raúl Martínez, del Eliocroca, quien llegó a meta con sólo 12 segundos de renta sobre Bart Jaeken, superando ambos las dos horas de carreras. El podio lo completó Miguel Ángel Cantero, del Tader Molina Building, un especialista en bicicleta de montaña. En categoría femenina absoluta, Eliana Sotelo cruzó la línea de meta en primera posición, con un tiempo de 2 horas y 37 minutos, siendo la segunda plaza del podio para Vanessa Huesa.

La temporada de triatlón, pese a que aún estamos en el mes de agosto, está a punto de concluir. Sólo restan por disputar dos citas esta temporada del calendario regional, ambas de la modalidad de duatlón cross, el 15 de octubre en Cieza y el 23 del mismo mes en Jumilla.