El FC Cartagena dejó de ilusionar hace unas cuantas jornadas y no porque no sea capaz de desplegar un juego como el del año pasado, sino porque no es capaz de hacer los mismos resultados que la anterior temporada. Si practica un fútbol como el que desplegó en la primera parte del choque que disputó el pasado sábado ante el Nástic de Tarragona o frente al Córdoba, ¿por qué no gana?
El problema este año hay que buscarlo más abajo que arriba. El FC Cartagena ha empezado a convivir esta campaña con dos condenas que le están haciendo perder demasiados puntos y la ilusión de emular la hazaña de la temporada anterior.
Los goles encajados a balón parado se están haciendo una constante este año. Los que siguen al equipo mantienen la respiración cada vez que la defensa tiene que solventar una situación como una falta botada en su contra. En el enfrentamiento que empató a dos tantos ante el Nástic, el Cartagena encajó el primer tanto tras una falta botada por Gerardo, que dio paso al remate de cabeza por parte de Rodri ante la pasividad de la zaga cartagenerista.
También en jugadas a balón parado llegaron los tantos recibidos en la quinta jornada ante el Córdoba (1-2), en ambos casos marcados por Usero tras sendos saques de esquina, y el primero que hizo el Numancia (2-0) en el estadio Los Pajaritos en la cuarta jornada, conseguido por Nagore, igualmente de cabeza y tras otro córner.
El entrenador se quejaba amargamente de esta grave deficiencia en defensa en la rueda de prensa del pasado sábado. Decía que «llueve sobre mojado» y añadía que «asumo cualquier crítica y el primer enfadado por lo que está sucediendo soy yo conmigo mismo. Tenemos que ser capaces de dominar las dos áreas, en ataque y en defensa». Sin embargo, este equipo no es capaz de dominar su área y eso fue precisamente lo que le hizo el año pasado y ocupar en la jornada séptima la segunda posición, con los mismos puntos que el primer clasificado.
La fortaleza defensiva ha pasado a mejor vida y tan sólo hay que observar que esta campaña ha encajado al menos un tanto en todos los encuentros disputados. Suma diez goles en contra, a una media de 1,4 por enfrentamiento, muy lejos de los números de la séptima jornada de la temporada anterior. Al término de esta sólo había recibido tres goles y en cuatro encuentros había dejado su portería a cero.
Números de descenso
A tenor de lo que viene haciendo en este primer tercio de la primera vuelta, el FC Cartagena está empezando a hacer números de descenso. Suma ocho puntos en siete jornadas, fruto de dos triunfos, dos empates y tres derrotas.
Además, uno de sus puntos débiles está siendo los encuentros en su campo. Ha disputado hasta ahora cuatro encuentros, de los que tan sólo pudo ganar uno, frente al Barcelona B. Después de aquella jornada, la tercera de la temporada, el conjunto entrenado por Juan Ignacio Martínez ha conseguido acumular dos puntos en cuatro partidos, los dos empates ante el Tenerife y frente al Nástic de Tarragona.
Al máximo responsable del equipo albinegro se le acumulan los problemas y no es capaz de solventarlos de momento. Las lesiones y sanciones le han trastocado todas las semanas el once que salta al campo, de ahí que no haya logrado mantener un once fijo desde las dos primeras jornadas ligueras. La defensa es un auténtico quebradero de cabeza, porque cada semana son nuevos los que la conforman. Han pasado por la misma Cygan, Pablo Ruiz, Chus Herrero, Cala y Txiki como centrales. Además, el entrenador ha decidido dar entrada a Kiko Casilla en la portería, cuando se habían consumido cuatro jornadas, dejando claro que no confía en Rebollo.
