Una expedición formada por investigadores del Museo Nacional de Arqueología Subacuática (Arqua), militares del Museo Naval y científicos del Instituto Español de Oceanografía (IEO) parten hoy en barco desde Algeciras para rescatar más tesoros de la fragata Nuestra Señora de las Mercedes. Los expertos se trasladarán hasta el Golfo de Cádiz, lugar donde naufragó el barco de la Armada tras la batalla del Cabo de Santa María, para visionar con un dron submarino en qué estado están los restos del yacimiento de esta nave de guerra.

La exploración, que se realizará a bordo del buque oceanográfico vigués Ángeles Alvariño, durará cinco días y se trata de una operación «pionera» desarrollada íntegramente por técnicos españoles bajo la coordinación del ministerio de Cultura. Los trabajadores del IEO serán quienes lleven los mandos del vehículo teledirigido bajo las directrices de arqueólogos submarinos como Iván Negueruela, director del Arqua. Este apunta que «vamos a mapear el pecio y a topografiar todo el fondo con una sonda para ver cuánto queda del yacimiento y en qué estado se encuentra el buque de la Armada».

Respecto a los tesoros que aún puedan encontrarse bajo el mar, Negueruela sostiene que «incluso pueden aparecer varias monedas más en el interior del barco porque según el manifiesto de carga faltan todavía por recuperar algunas de ellas». Además, el arqueólogo desvela que «la Mercedes llevaba muchas más cosas de valor que los cazatesoros de Odyssey no se llevaron porque no podían venderlas fácilmente en Internet como más de una treintena de cañones, las anclas, y un cargamento con centenares de lingotes de estaño y de plata».

Un kilómetro de profundidad

Los investigadores utilizarán un vehículo operativo remoto, denominado ROV Liropus 2000, que estará unido mediante cableado a modo de cordón umbilical con el barco oceanográfico. La tecnología que posee le permite acceder a fondos marinos de hasta 3.000 metros. Aunque en este caso sólo tendrá que llegar a los 1.100 metros, profundidad en la que los científicos estiman que se encuentran los restos de la fragata Mercedes.

Odyssey devolvió más de medio millón de monedas

  • La empresa norteamericana de cazatesoros Odyssey se vio obligada en 2012 por el juez Mark Pizzo, de Tampa (Florida), a devolver a los museos españoles todas las monedas que había encontrado en 2007 en el Atlántico porque el barco en el que estaban, la fragata Mercedes, pertenecía a la Armada española. Este tesoro fue valorado por la compañía americana en cerca de 500 millones de euros. Odyssey tuvo que entregar a España las 574.553 monedas que expolió del barco, de las cuales 212 eran de oro, 309.396 de plata y, el resto, concreciones apelmazadas.