Desde la Dirección General de los Derechos de los Animales, que depende de la Subsecretaría de Derechos Sociales y Agenda 2030, se está promoviendo la redacción de una Ley Marco de Bienestar Animal. Una de las propuestas que parece cobrar fuerza es la creación de un documento de identidad para los animales, o DNI para los animales de compañía.

Lo que se pretende con este documento o DNI animal es la correcta identificación de los animales de compañía en todo el territorio nacional, registro de tratamientos veterinarios y calendario de vacunas, e identificación mediante ADN.

El objetivo que se persigue con este DNI animal, según se manifiesta desde la Dirección General de los Derechos de los Animales, es además de identificar a los animales salvando las deficiencias que presenta el uso del microchip (que seguiría siendo obligatorio), evitar casos de cría ilegal de animales e identificar a los responsables del abandono de animales y maltrato.

Con la aprobación de esta medida, que se encuentra en fase muy inicial, se exigiría también a los titulares la contratación de un seguro de responsabilidad civil, al igual que aquel que se exige a los titulares de perros catalogados como potencialmente peligrosos.

De igual forma, la tramitación del correspondiente DNI animal exigirá el abono de una tasa.

Frente a la propuesta de la creación del DNI animal se plantean dudas sobre su eficacia, si efectivamente se solucionarán las carencias y dificultades en la identificación que plantea el microchip (desplazamiento del chip, dificultades para identificar al animal con un microchip de otra Comunidad Autónoma), su verdadero coste, o si será una medida más para recaudar a costa de quienes son responsables de algún animal.

Lo cierto es que cualquier medida que tenga como objetivo la protección de los animales y la mejora de sus condiciones de vida puede resultar favorable, pero debemos plantearnos si efectivamente esta lo es, si se dotará de medios efectivos para su implantación y si se conseguirán los objetivos marcados o si quedará como una mera medida sin resultados.