Proeza forense

La increíble historia de un copiloto de guerra norteamericano desaparecido en Sicilia en 1943

Sus restos han sido localizados e identificados 80 años después y enterrados este mes en Florida 

Gilbert Haldeen Myers, el copiloto, en una foto tomada durante la segunda guerra mundial.

Gilbert Haldeen Myers, el copiloto, en una foto tomada durante la segunda guerra mundial. / DPAA / Universidad de Cranfield

Cranfield University/T21

Los restos de un copiloto norteamericano de guerra, que en 1943 sobrevivió en Sicilia a un ataque antiaéreo, han sido localizados e identificados después de 80 años desaparecido. Ya descansan en San Petersburgo, Florida, desde el 10 de noviembre. Toda una proeza de la medicina forense.

Un día de verano de julio de 1943, un bombardero B-25 Mitchell estadounidense salió de Túnez, en el norte de África, con la misión de atacar el aeródromo de Sciacca en Sicilia, Italia.

A bordo había una tripulación de seis personas, incluido el segundo teniente de las Fuerzas Aéreas del Ejército de EE. UU. (USAAF), de 27 años, Gilbert Haldeen Myers, el copiloto.

Pero, cuando el avión se acercaba a su objetivo designado, el bombardero B-25 fue alcanzado por fuego antiaéreo, lo que le hizo perder altitud y estrellarse en un campo a aproximadamente unos 2,5 kilómetros del aeródromo que pretendían bombardear.

Los testigos en ese momento dijeron que un miembro de la tripulación salió del B-25 antes de que se estrellara, pero los restos de Myers nunca fueron recuperados y posteriormente fue declarado desaparecido en acción. No hubo supervivientes ni ningún registro de pasajeros hechos prisioneros.

Trabajo minucioso

Se estima que alrededor de 72.000 militares estadounidenses siguen desaparecidos sólo de la Segunda Guerra Mundial, y se considera que alrededor de 39.000 son recuperables. Durante años, Myers fue una de esas personas. En 1947, los investigadores llevaron a cabo operaciones de búsqueda y recuperación cerca de Sciacca, pero no pudieron localizar nada que vinculara con Myers.

Pero el año pasado, casi 80 años después del accidente del B-25, eso cambió. Los expertos forenses del equipo de Recuperación e Identificación de Víctimas de Conflictos (CRICC) de la Universidad de Cranfield trabajaron en asociación con colegas de la Agencia de Contabilidad de Prisioneros de Guerra/Desaparecidos en Acción (DPAA) de la Defensa de EE. UU., y viajaron a Sciacca para llevar a cabo una minuciosa investigación.

Localizado casi 80 años después

En octubre de 2023, los investigadores anunciaron que habían localizado restos humanos pertenecientes a Myers y, mediante análisis de ADN en los EE. UU., ahora se ha contabilizado su paradero.

El equipo de Cranfield estaba formado por un equipo de 20 personas, cada una asignada a rastrear los alrededores de la zona de impacto. Semejante tarea implicó un examen minucioso de toneladas de suelo, con el objetivo de recuperar fragmentos de restos humanos o efectos personales cruciales para identificar a los miembros de la tripulación.

El Dr. David Errickson, profesor titular de Arqueología y Antropología del Instituto Forense Cranfield, enfatizó los desafíos que enfrentaron durante la excavación en Sicilia, y enfatizó la importancia de dicho trabajo: "la recuperación de los restos del segundo teniente Myers no sólo facilita un entierro adecuado y completo con honores militares, sino que también permite a la familia recibir los efectos personales encontrados. Lo más importante es que supone un cierre para las familias de los desaparecidos o muertos en combate."

Los restos humanos fueron enviados al Laboratorio DPAA para su examen e identificación y el 10 de agosto de este año, fueron identificados como pertenecientes a Myers. También recuperaron algunos restos del avión, lo que podría indicar que el copiloto no llegó muy lejos después de que su avión se estrellase.

La identificación en la DPAA implicó análisis de ADN, además de evidencia antropológica y circunstancial encontrada por el equipo de Cranfield.

Ya en casa

El nombre de Myers está registrado en los Muros de los Desaparecidos en el Cementerio Americano Sicilia-Roma en Nettuno, Italia, junto con otros que aún están desaparecidos en la Segunda Guerra Mundial. Ahora hay planes para colocar una roseta junto a su nombre para indicar que se le ha contabilizado.

Antes del Día del Recuerdo de este año, fue enterrado en San Petersburgo, Florida, el 10 de noviembre.