Ciencias de la Tierra / Oceanografía

La Tierra se queda sin hielo marino antártico

Este invierno austral los niveles no se recuperaron y los científicos temen que la situación sea irreversible

El mapa muestra la concentración de hielo marino antártico el 27 de junio de 2023. El blanco indica hielo sólido y el azul oscuro representa océano abierto. También se incluye el borde de hielo promedio para el período 1981–2010, lo que permite apreciar la disminución de la capa de hielo con el paso del tiempo.

El mapa muestra la concentración de hielo marino antártico el 27 de junio de 2023. El blanco indica hielo sólido y el azul oscuro representa océano abierto. También se incluye el borde de hielo promedio para el período 1981–2010, lo que permite apreciar la disminución de la capa de hielo con el paso del tiempo. / Créditos: NOAA Climate.gov/NSIDC.

Pablo Javier Piacente

El hielo marino antártico se desintegra: las últimas mediciones de su retroceso superan todos los mínimos históricos anteriores, alcanzando el punto más bajo desde que comenzaron los registros oficiales. Según las observaciones científicas, los océanos del planeta han perdido unos 2,6 millones de kilómetros cuadrados de hielo en los últimos 12 años: el retroceso podría ser imparable y generar graves consecuencias climáticas y ecológicas.

Una línea temporal que muestra la concentración de hielo marino en el Océano Austral, elaborada por investigadores climáticos de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA, según las siglas en inglés) muestra que la capa de hielo está muy por debajo de lo que debería esperarse para esta época del año. Al mismo tiempo, científicos australianos han llegado a una conclusión similar, indicando que la reducción en el hielo antártico ha llegado a niveles nunca antes apreciados.

De acuerdo a una nota de prensa, la comparación de la concentración de hielo marino de fines de junio de 2023 con el borde de hielo promedio estimado para la misma época del año muestra concentraciones por debajo de lo esperado en casi todo el continente. Solo en partes del norte del mar de Amundsen, cerca de la Antártida occidental, el hielo marino parece recuperarse.

Una disminución sin precedentes

Cada año, tanto en el hemisferio norte como en el sur, el hielo marino crece y se encoge con las estaciones. Pero la extensión del hielo marino antártico medida por los expertos de NOAA el 27 de junio de 2023 cayó por debajo del promedio para esa fecha en casi cuatro veces el tamaño del estado de Texas, si se la compara con los registros del período 1981-2010. En comparación con la extensión del hielo marino invernal antes de 2010, al océano ahora le faltan unos 2,6 millones de kilómetros cuadrados de hielo.

La caída no registra antecedentes, y preocupa a los científicos porque podría marcar un punto de inflexión irreversible. “Se trata de cinco desviaciones estándar más allá de la media. Esto significa que si nada hubiera cambiado, esperaríamos ver un invierno como este aproximadamente una vez cada 7,5 millones de años”, indicó a ABC News Australia el oceanógrafo físico Edward Doddridge, mostrando la contundencia de este evento atípico.

El hielo marino es clave para el equilibrio de la Tierra por diferentes razones. Una de las más importantes es que colabora con la regulación de la temperatura global a través de un fenómeno denominado retroalimentación del albedo del hielo: esto indica que el hielo refleja el calor del Sol hacia el espacio, ayudando a regular la temperatura del planeta. 

Una fuerte disminución en esta capa de hielo, aparentemente motivada por la acción humana sobre el ambiente, podría propiciar un mayor incremento de las marcas térmicas a nivel global, entre otros efectos climáticos adversos. "Si hay menos hielo, entonces la luz solar que golpea la superficie del océano se absorbe en lugar de reflejarse en el espacio. Eso acelera el calentamiento en esa área, y ese calor luego se traslada al resto del mundo", agregó Doddridge.

La extensión del hielo marino alrededor de la Antártida está disminuyendo peligrosamente: los científicos están preocupados sobre las consecuencias de este fenómeno y creen que no habría retorno. Créditos: ABC News / YouTube.

Ecosistemas en peligro

Además del aspecto climático, el ciclo anual de congelación y derretimiento impulsa las corrientes globales que transportan agua rica en nutrientes al resto del océano, alimentando los ecosistemas. El hielo antártico es también el hábitat de animalescomo pingüinos y focas, siendo esencial para organismos más pequeños como el krill, que se alimentan de las algas que existen por debajo de los hielos antárticos.

A principios de este año, los científicos observaron un mínimo histórico en la cantidad de hielo marino alrededor de la Antártida, luego de los mínimos históricos registrados en 2016, 2017 y 2022. Por lo general, el hielo ha podido recuperarse durante el invierno del hemisferio sur, cuando el continente blanco está oscuro y aún más frío que de costumbre. 

Pero este año todo ha sido diferente: por primera vez desde que existen registros oficiales, la extensión del hielo marino no ha podido recuperarse sustancialmente durante el período invernal, dejando a los científicos desconcertados. Algunos especialistas sostienen que si continúa esta tendencia a la baja del hielo marino, será difícil revertir la trayectoria en el futuro.