Investigan a una empresa de Alcantarilla por vender madera reciclada para calefacción con tóxicos

La Guardia Civil, en el marco de la operación 'Woodland', investiga a cuatro personas por irregulares con la gestión de residuos de madera, que ha culminado con la investigación de cuatro sospechosos como presuntos autores de delitos contra los recursos naturales y el medio ambiente; y contra los consumidores.

La investigación se inició tras la inspección a una empresa de Alcantarilla, dedicada principalmente a la gestión de residuos procedentes de la madera, donde los agentes observaron que no se realizaba el descarte de palets, muebles y restos de podas que pudieran contener productos peligrosos como pinturas, pese a que la mercantil aseguraba que sus productos procedían de procesos forestales sostenibles.

Ante las sospechas de que las labores de gestión no hubieran sido las correctas, se procedió a la recogida de muestras para su remisión al laboratorio de criminalística de la Guardia Civil, que encontró fragmentos de naturaleza plástica, procedentes de restos de pintura, PVC y melanina-formaldehido.

En el caso del PVC, su exposición a altas temperaturas libera dioxinas procedentes del cloruro de vinilo y, por tanto, tóxicas para la salud.

Por otra parte, la melanina-formaldehido es una resina sintética obtenida de la combinación química de la melanina: un sólido cristalino derivado de la urea y formaldehído, de alta resistencia térmica que, cuando se evapora genera un efluvio invisible, inodoro y altamente tóxico.

La actuación policial ha culminado con la inmovilización de cerca de 13 toneladas de briquetas terminadas, dispuestas para venta. Todo ha sido puesto en conocimiento de la Consejería de Medio Ambiente de la Región de Murcia, por incumplimientos en la autorización sectorial, por la utilización de maderas contaminadas que deberían haber sido excluidas del proceso de fabricación de las briquetas de calefacción.

El examen de la documentación de la mercantil inspeccionada ha permitido conocer la supuesta venta, en el mercado nacional, de más de 500 toneladas de briquetas de madera, supuestamente contaminadas.

Las diligencias instruidas han sido puestas a disposición del juzgado de Instrucción de Murcia.