Tráfico

Muere una mujer al estrellarse cuando circulaba con el coche en sentido contrario por la A-7 en Alhama

Una docena de conductores ya habían alertado al 112 para decir que habían tenido que esquivar el automóvil, que acabó colisionando contra otro turismo

Bomberos y saniatrios, en el lugar del accidente mortal.

Bomberos y saniatrios, en el lugar del accidente mortal. / CEIS

Ana Lucas

Ana Lucas

Una mujer de 40 años ha muerto al estrellarse de frente con su coche contra otro vehículo en Alhama de Murcia. Los hechos ocurrieron sobre las dos de la mañana en la A-7, a la altura del kilómetro 598, informa el Centro de Coordinación de Emergencias.

Una docena de conductores ya habían alertado al 112 para decir que habían tenido que esquivar, con maniobras arriesgadas, un automóvil que circulaba en sentido contrario por la referida autovía.  Asustados por si se trataba de un kamikaze que pudiera estrellarse y poner en peligro su integridad, los testigos telefoneaban al 112. Fuentes cercanas al caso apuntaron que algunos testigos dijeron que el turismo que conducía la mujer se había parado varias veces en el arcén. Al producirse el siniestro, más llamadas: "Los llamantes hablaban de una colisión frontal a consecuencia de la cual había atrapados y heridos en los dos vehículos implicados", concreta Emergencias.

Una herida a la Arrixaca

Al lugar del accidente se movilizaron patrullas de la Guardia Civil, bomberos del Consorcio de Extinción de Incendios y Salvamento de la Región de Murcia y una Unidad Móvil de Emergencias (UME) del 061. A su llegada, la conductora de uno de los turismos ya estaba muerta. La otra conductora (una mujer de 46 años) fue rescatada por los bomberos, atendida por los sanitarios y trasladada al Virgen de la Arrixaca de Murcia.

A falta de una causa oficial de lo sucedido, la mujer que causó el accidente no tiene por qué ser una kamikaze: cabe recordar que hay personas que, al volante, se despistan por cuestiones patológicas, que pasan por tener una medicación, una enfermedad o cuestiones neurológicas que dan lugar a que el paciente que las sufre de una forma no intencionada, cometa el error de entrar en sentido contrario en una carretera. Otra cuestión es el consumo de alcohol y drogas, una irresponsabilidad por la cual muchos conductores van en sentido contrario sin darse ni siquiera cuenta de lo que están haciendo. En estos casos, no se trataría de una desorientación por algún tipo de patología neurológica: es un delito contra la seguridad vial. La tercera posibilidad: la distracción.