Investigación

El dueño de Teatre vuelve a la Región desde el Caribe para declarar como investigado

El gerente de la discoteca, Juan Inglés Rojo, y la encargada del local, Eva Martínez, están citados a declarar este martes ante la jueza

Fonda Milagros, en llamas, el domingo 1 de octubre.

Fonda Milagros, en llamas, el domingo 1 de octubre. / MIGUEL MARTÍNEZ.

Ana Lucas

Ana Lucas

Hace unos meses, Marco Martínez, uno de los investigados por las 13 muertes del caso Atalayas, plantó a los investigadores de la Policía Nacional, que le citaron a declarar en calidad de imputado, por estar en el Caribe. En concreto, en Isla Margarita, donde montó otro negocio, un beach club. Martínez es un conocido empresario del ocio nocturno en la Región (en tiempos, con bares como ZM, El Palmero, Splash, Flamingo o la propia Teatre) que quiso expandir sus negocios al otro lado del charco. Tres meses y medio después de la tragedia que costó la vida a trece personas, este empresario del ocio nocturno ha vuelto a la Región, confirman fuentes policiales. Marco Martínez tendrá que declarar tanto ante la Policía como ante la instructora que se ha hecho cargo de la causa. La jueza lleva desde la semana que viene tomando declaración a los supuestos responsables de lo sucedido: lleva ya dos y este martes van otros dos.

En concreto, la titular del Juzgado de Instrucción Número 3 de Murcia comenzaba el pasado martes a escuchar a las personas que están en el punto de mira tras el incendio que tuvo lugar el pasado 1 de octubre y donde trece personas perdieron la vida. Este martes día 30 siguen las declaraciones y comparecerán ante la jueza instructora el administrador de Teatre, Juan Inglés Rojo, y la encargada del local, Eva Martínez, que es hermana de Marco Martínez.

Manuel Maza, abogado de Marco Martínez, decía la semana pasada en la Ciudad de la Justicia que su cliente no tiene ya vinculación alguna con la sala siniestrada: que en tiempos sí era suya, pero que hace un lustro que ya se deshizo de la sociedad. La Policía, no obstante, sospecha que, si no sobre el papel, este empresario murciano sí continuaba teniendo relación con la salaTeatre, por lo que tendría también responsabilidad a la hora de esclarecer lo sucedido.

Previsiblemente, en su declaración tanto ante los investigadores como ante la instructora, Martínez reitere lo que ya subrayó su defensor: que él ya no tiene vinculación alguna con el local donde se originó el fuego.

Fuentes cercanas al caso apuntan que puede que Juan Inglés Rojo, que figura como administrador de la discoteca Teatre, es únicamente un testaferro.

La ‘zona cero’ de Atalayas, con un altar a los difuntos, el día antes del desescombro de los locales.

La ‘zona cero’ de Atalayas, con un altar a los difuntos, el día antes del desescombro de los locales. / JUAN CARLOS CAVAL