Investigación

Así es el 'megacomplejo' que ha hallado la Policía en la comunidad budista de Abanilla

José Manuel, el líder de Mahasandhi, almacenaba en un zulo 180 kilos de mercurio, que utilizaba para elaborar productos 'milagrosos' para sus fieles

También se intervinieron 90.000 euros en metálico, un revólver y 19 kilos de marihuana

VÍDEO: Así es el complejo en el que el líder espiritual de una comunidad suministraba “mercurio purificado” a sus adeptos

La Opinión

EFE

José Manuel, el líder de la comunidad budista Mahasandhi, en prisión preventiva tras ser detenido el viernes por la Policía Nacional por elaborar y suministrar a sus fieles productos 'milagrosos', además de estar acusado de delitos medioambientales y por asociación ilícita, entre otros, almacenaba en un zulo que construyó en Abanilla, donde estaba radicado el grupo, 180 kilos de mercurio y cinabrio.

La Policía Nacional, en una compleja operación coordinada por la Unidad Central de Información y en la que han intervenido en el último año diversos grupos especializados, ha detenido al líder espiritual del citado grupo, que elaboraba supuestos elixires energizantes a partir de mercurio, fundamentalmente, para administrárselos a sus adeptos y manipular sus voluntades con fines económicos y de poder.

Según ha informado este miércoles la Policía, esta comunidad budista ocupaba una finca de más de 100.000 metros cuadrados, formada por multitud de casas cueva, albergue, almacenes, templos, búnkeres y laboratorios clandestinos, y en la que se organizaban retiros espirituales y otras actividades de "sanación" y bienestar.

El acusado, presidente de la Fundación Mahasandhi y que se autodenominaba 'Trascendencia total', presidía las ceremonias y retiros donde suministraban sustancias que pueden causar graves daños para la salud y, tras ser puesto a disposición del juzgado de guardia, ingresó en prisión.

Durante sus prácticas de alquimia, el arrestado estaría vertiendo y almacenando irregularmente los desechos, suponiendo un grave riesgo también para el medio ambiente.

Gracias a la colaboración ciudadana, a través del correo sectasdestructivas@policia.es, se puso en conocimiento de los investigadores las sospechas sobre estos hechos, que se cometían en una comunidad asentada en esta pequeña población murciana desde hace 15 años.

El acusado, presuntamente, utilizaba diferentes técnicas de manipulación y se valía de los productos 'milagrosos' para manipular a sus adeptos.

Según la Policía, esta secta se financiaba con las donaciones y el pago de los asistentes a estas actividades y contaba con la colaboración de una mercantil, domiciliada en un polígono industrial de Lorquí, donde elaboraban elixires que luego se distribuían en herbolarios, se vendían en la Fundación o incluso online.

El líder era reconocido como sanador, guía espiritual y maestro y, bajo fines humanitarios y sociales, conseguía que sus adeptos trabajaran y realizaran aportes económicos para su Fundación, aumentando en relativamente poco tiempo su patrimonio.

Los más fieles seguidores del líder residían en casas cueva situadas en torno a la casa del maestro, ejerciendo diferentes tareas y funciones según las necesidades personales de éste o de la Fundación (administración, gestión de redes sociales, jardinería, mantenimiento, formación, etc.), sin cumplir los requisitos legales, además de realizar largas jornadas de trabajo.

Según los investigadores, el detenido pretendía elaborar una sustancia llamada "mercurio purificado", utilizando técnicas de alquimia ya que al parecer podría tener efectos energizantes y vitalizadores.

Este proceso era realizado por los adeptos, los cuales comenzaron a manifestar diferente sintomatología originada por la neurotoxicidad del mercurio.

Asimismo, durante las ceremonias realizadas en la Fundación se distribuirían diferentes clases de psicoactivos perjudiciales para la salud y de cuyos efectos presuntamente se valdría la secta para lograr someter la voluntad de los consumidores.

El líder o maestro pasaba largas temporadas encerrado en su casa cueva, acompañado de varias mujeres, las cuales le asistían y realizaban las tareas que disponía.

Vista de la finca de Abanilla

Vista de la finca de Abanilla / EFE

La devoción a la figura del líder era tal, que dichas personas habrían abandonado totalmente la relación con su círculo familiar y social para entregarse fielmente a las decisiones de éste, las cuales son denominadas "renunciantes". Estas personas, al igual que el maestro, realizaban también votos de silencio durante largos periodos de tiempo.

Registros en Abanilla y Lorquí

Los agentes practicaron el pasado viernes de forma simultánea dos registros, uno en la finca de Abanilla, donde residía el líder y alrededor de 10 seguidores de éste; y otro en la nave industrial de Lorquí, donde se elaboraban los productos que luego vendían.

Fruto de estos registros se han intervenido 90.000 euros en metálico, un revólver, 19 kilos de marihuana, múltiples sustancias para la práctica de la alquimia como el mercurio, así como documentos sobre la experimentación con estas sustancias peligrosas y diverso material pseudoreligioso y esotérico.

A este hombre se le acusa de delitos contra la salud pública, contra el medio ambiente, contra los derechos de los trabajadores, contra la integridad moral y asociación ilícita.

Por su parte, dadas las irregularidades encontradas, los servicios inspectores de la Consejería de Salud Pública de Murcia han clausurado la referida nave del polígono industrial de Lorquí (Murcia).