Detenido por agresión sexual a una menor cartagenera en un crucero

Lo que era un viaje de estudios donde disfrutar con los compañeros del curso de una experiencia única se convirtió en una pesadilla para una alumna de un instituto cartagenero que, presuntamente, sufrió una agresión sexual a bordo de un crucero en el que recorrían el Mediterráneo. Los hechos ocurrieron, según ha podido saber La Opinión, la madrugada del domingo, cuando el buque cubría el tránsito entre Marsella y Barcelona.

Las fuentes consultadas explican que, a la salida de una discoteca del crucero en la cubierta número 7 del propio buque, un grupo de turistas italianos acosaron y manosearon a la menor, en contra de su voluntad. Tanto la menor como las compañeras de instituto que la acompañaban en ese momento, rechazaron los hechos y lo pusieron en conocimiento de la tripulación del barco. De hecho, estos pasajeros también intentaron abusar de otra de las chicas, aunque no lo consiguieron.

También informaron a sus padres a través de sus teléfonos móviles y han sido éstos los que han provocado la actuación de la Guardia Civil en el caso, que acudió al buque durante su estancia en la ciudad condal para, posteriormente, arrestar al sospechoso en el puerto de Palma de Mallorca este martes.

Y es que, el trabajo de la Benemérita no se redujo a conocer los hechos sino que además abrieron una investigación que les llevó a diferentes pesquisas, entre ellas el visionado de las cámaras de seguridad del crucero, para armar el correspondiente expediente. A la llegada a Palma del buque, apresaron al sospechoso, que ayer prestaba declaración en dependencias policiales.

Los padres de las chicas agredidas, una en grado de tentativa, pusieron también ayer la correspondiente denuncia ante la Guardia Civil en Cartagena, donde declararon las dos menores sobre los hechos acontecidos a bordo del crucero. Según ha podido saber La Opinión, los progenitores de las alumnas también interpondrán una denuncia ante la compañía de cruceros al entender que no actuaron conforme a la legalidad o, al menos, en cuanto a la moralidad. Y es que, tal y como ha trascendido, las menores expusieron el caso a los propios tripulantes del buque, aunque apenas recibieron consejo más allá de poner una reclamación. Ahora los padres redactarán una denuncia por trato vejatorio y por coacciones a menores por no iniciar el protocolo para poner la denuncia correspondiente sobre los hechos y querer que quedara solo en una reclamación.

Indefensas a bordo

De hecho, los padres afirman que las niñas se sintieron «indefensas» a bordo del crucero, «sin contar con nadie en el interior del buque que pudiera asistirles en un momento tan delicado», explican. Y es que, según señalan, una trabajadora del crucero se entrevistó con ellas la misma noche de los hechos y se comprometió a volver a hablar con ellas por la mañana, aunque no acudió a la cita.

Finalmente, los padres se han puesto en contacto vía email con la naviera para obtener mayor información, hasta el momento, sin éxito, lo que les ha llevado a plantear la denuncia contra la compañía. Esta redacción también ha intentado recabar información de la empresa aunque los intentos han sido infructuosos.