Una mujer de 45 años de edad acababa este lunes por la tarde en el hospital tras picarle una avispa en un centro comercial de Murcia, indican testigos y fuentes cercanas al caso.

Según los presentes, la mujer, que se encontraba de compras con su hija, se desplomó y comenzó a convulsionar en la puerta de una tienda de ropa tras la picadura del insecto. Aunque su picadura pueda parecer inofensiva, para algunas personas es un auténtico riesgo.

El servicio de seguridad del centro comercial estuvo en todo momento pendiente de lo que pasaba. Alarmados, testigos pidieron ayuda y al lugar se movilizó rápidamente una ambulancia, cuyos sanitarios atendieron in situ a la mujer, para trasladarla al hospital más cercano: el Morales Meseguer de Murcia.

Las reacciones alérgicas graves por picaduras de avispas y abejas han aumentado alrededor de un 20 por ciento en los últimos diez años. La mayoría de estos casos se producen en verano, cuando estos insectos están más activos y se realizan más actividades al aire libre.

Alrededor de cien personas (en cifras de 2021) siguen tratamiento con inmunoterapia específica con veneno de avispas o abejas en la Región a causa de su alergia a la picadura de estos insectos.

En mayo de este año, en la vecina provincia de Alicante, una mujer de 67 años fallecía tras la picadura de una avispa en Teulada Moraira. Minutos después de la picadura, la mujer, de nacionalidad británica, perdía el conocimiento como consecuencia de un shock anafiláctico (una grave reacción alérgica). 

A la llegada de los servicios de emergencia, y después de realizar maniobras de reanimación cardiopulmonar avanzada y otras técnicas de recuperación, solo se ha podido certificar su fallecimiento.

Existen tres reacciones ante el veneno de abejas y avispas.

  • Reacciones por la acción propia del veneno. Tras la picadura aparece una reacción en la piel de corta duración, con enrojecimiento e hinchazón alrededor del sitio de la picadura, de un diámetro menor de 10 cm. En función de la zona de la picadura podemos sentir un dolor más o menos intenso, e incluso picor, que desaparecerá en cuestión de pocas horas.
  • Reacciones locales extensas. En estos casos la cosa se complica un poco, porque la inflamación se extiende más allá de los 10 centímetros y dura mucho más tiempo. Por ejemplo, si hemos tenido la mala suerte de que nos piquen en una mano o un pie, se puede llegar a inflamar todo el brazo o parte de la pierna. Además, suele doler, picar y la zona estará enrojecida y dura.
  • Anafilaxia. Este tipo de reacción generalizada se produce en personas alérgicas al veneno de estos insectos. Una sola picadura bastará para que aparezcan ronchas o habones, dificultad para respirar, mareo… Y si nos encontramos ante este tipo de reacción el tiempo es vital. Así que hay que llamar a los servicios de emergencias para que traten al paciente lo antes posible.