Violencia machista

Detenido en Beniel por secuestrar a su mujer en su propia casa y maltratarla durante dos años

Cuando el hombre se llevó al bebé que tienen en común, la víctima, una joven de 22 años, logró escapar de su cautiverio y acudir al cuartel, donde sufrió un desmayo

Manifestación contra la violencia machista

Manifestación contra la violencia machista / R. D. C.

Ana Lucas

Ana Lucas

Un hombre de 30 años de edad y nacionalidad marroquí ha sido detenido en Beniel acusado de maltratar a su esposa y encerrarla en la vivienda familiar, de donde la mujer, una joven de 22 años, logró escapar para pedir socorro

El arresto de este individuo se produjo el pasado martes. Una llamada a Emergencias minutos antes de las ocho y media de la tarde alertaba de que una chica necesitaba ayuda: había sufrido una indisposición en el cuartel de la Guardia Civil y se había desmayado. Al lugar se desplazó una ambulancia, cuyos sanitarios atendieron a la joven in situ, sin necesidad de trasladarla a un centro hospitalario. 

Cuando se recuperó y pudo declarar, la chica, extranjera y que apenas entiende el idioma castellano, relató que había conseguido huir del encierro al que la sometía su propio esposo. Según explicó, llevaba dos años sufriendo agresiones por parte de este hombre, con el cual había tenido un hijo de corta edad, al que, según indicó, su padre se habría llevado, no sabía a dónde. La joven se encontraba angustiada por la suerte que pudiese haber corrido el menor de edad. 

Dado que el sujeto estaba plenamente identificado, los investigadores tardaron poco en dar con él y proceder a su detención. También se activaron las alarmas para dar con el bebé, el cual fue localizado en casa de un familiar, en perfecto estado de salud. 

El individuo fue puesto a disposición de un juzgado en Murcia, que, sin embargo, se ha visto obligado a archivar el procedimiento, pese a los indicios existentes, debido a que la víctima, asistida por una abogada y por un traductor, no quiso prestar declaración en sede judicial ni ratificar, por tanto, lo que había contado a la Benemérita sobre su calvario. 

Apunta la psicóloga Felipa Gea que son varias las razones que pueden llevar a una mujer a no querer seguir con el procedimiento penal en casos de violencia de género. Por ejemplo, «la dependencia económica o el miedo a las represalias», ya que «los maridos suelen amenazar a las mujeres para conseguir que éstas retiren las denuncias y buscan venganza porque se han presentado ante la ley».

«Hay que tener en cuenta la existencia de la ley no escrita sobre ‘la privacidad familiar’, que protege los privilegios de los hombres, incluido el derecho a abusar de la mujer, y la ruptura de esta privacidad se vive como una traición que debe ser castigada», comenta.

«Los hijos y las hijas son otras de las razones principales, no sólo para retirar las denuncias, sino también para aguantar la situación», destaca la experta.