Según el último parte médico facilitado por la Junta de Castilla y León, el niño, de origen marroquí, presenta daño pulmonar por inhalación de gases de combustión y precisa de soporte respiratorio con ventilador y soporte hemodinámico para mantener la presión arterial.

En el incendio registrado ayer en la segunda planta de un edificio de viviendas, y cuyo origen estuvo al parecer en algún aparato eléctrico, falleció un bebé de diez meses y otras seis personas resultaron heridas por inhalación de humo.

El estado del otro niño ingresado en el hospital de Burgos, de veinte meses, no reviste gravedad, ha sido trasladado a planta y está en observación.

La madre de los gemelos, de 38 años, continúa ingresada en el hospital general de Soria pero su evolución es buena y se prevé que reciba el alta médica la próxima semana.

En la jornada de hoy recibirá el alta médica otra de las heridas en el incendio, una mujer embarazada de 29 años y tía del bebé fallecido.

Esta mañana han llegado dos especialistas de la policía científica de Valladolid a investigar las causas del incendio, según han informado a EFE fuentes de la Subdelegación del Gobierno.

Estas dos personas, que ya trabajaron en la explosión de un edificio en Palencia del pasado mayo, han visionado desde las diez y media de la mañana fotos y vídeos del suceso y han mantenido una reunión con el jefe de bomberos de Soria, Oscar Zamora.

A las 12.00 del mediodía han llegado al edificio siniestrado, que ha sido precintado y custodiado durante toda la noche por la Policía Nacional.

Los expertos han tomado pruebas y, a falta de un completo estudio, las primeras investigaciones apuntan a que el origen del fuego pudo estar en una lámpara, que pudo provocar un cortocircuito o una explosión, según las citadas fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Soria.

La policía judicial ha tomado declaración a todos los testigos del suceso y a la mujer de 29 años herida leve.