Agentes del Grupo de Localización de Fugitivos de la Udyco-Central del Cuerpo Nacional de Policía, en colaboración con policías de Cartagena, han detenido a Robert Ferdinand G., natural de Pepinster (Bélgica), quien supuestamente mató a su mujer de una brutal paliza en 1998. El fugitivo estaba alojado en el camping Sangonera La Seca desde hacía unos meses, después de que llegase a la Región en su autocaravana acompañado de una compatriota a finales del año pasado. Al parecer, el presunto homicida estuvo primero alojado en un camping de Los Alcázares y luego se mudó al de Sangonera, donde fue localizado y detenido, ofreciendo una fuerte resistencia en el momento del arresto.

Robert Ferdinand G. tiene interesada una Orden Europea de Detención y Entrega por las autoridades judiciales belgas, dictada recientemente, por matar presuntamente a su mujer.

El 17 de septiembre de 1998 Robert y su esposa pasaban unos días en el camping de la localidad belga de Nandrin. Después de una noche festiva con unos amigos, el arrestado golpeó violentamente a su mujer, causándole graves lesiones en la cadera a consecuencia de las cuales murió poco después de su ingreso en un hospital. Al parecer, tras golpearla, el fugado se fue a la cama y no fue hasta el día siguiente cuando llevó a su mujer a un centro sanitario, asegurando que había sufrido una caída.

El informe del médico forense dictaminó que los golpes, que se concentraban en la cabeza y las extremidades superiores -lo que demuestra que la mujer trató de defenderse-, fueron producidos por uno o varios instrumentos contundentes y la causa de la muerte fue una hemorragia cerebral grave. La víctima tenía, asimismo, diversos hematomas en distintas partes de su cuerpo, lo que demostraba que era maltratada con frecuencia.

Las personas que conocieron al detenido en la Región aseguran que era muy correcto y no le consideraban conflictivo.