Los pelos tienen raíz y tallo. El tallo es la parte que sobresale de la piel. La raíz se encuentra dentro de la piel en el folículo piloso. Al folículo llegan finos vasos sanguíneos que proporcionan oxígeno y nutrientes a la raíz, que es la parte viva del pelo. Junto al folículo están las glándulas sebáceas que segregan la grasa, y los músculos pilosos que erizan los pelos cuando tenemos frío o miedo. En el folículo también hay fibras nerviosas, por eso sentimos el tacto cuando los pelos se doblan al tocarlos.
El pelo de los humanos tiene un diámetro que varía entre 0.05 y 0.1 milímetros, dependiendo de la raza, del color del pelo y del tipo de pelo de cada persona. Los más gruesos tienen el grosor de un folio de papel. Los pelos lisos son cilíndricos, pero los rizados tienen forma achatada. Los pelos están formados por fibras de una proteína llamada queratina, la misma que hay en las uñas. Cuanta más queratina más fuerte es el pelo. En el pelo rizado las fibras de queratina están curvadas.
Los pelos tienen varias capas. La corteza tiene las fibras de queratina y también contiene los pigmentos de una sustancia llamada melanina, que es la que da el color. La corteza es la parte principal del pelo y de ella depende la resistencia y la forma. En el exterior está la cutícula, que está formada de escamas de queratina y es transparente. De la cutícula depende el aspecto del cabello, pues puede deteriorarse por el viento, el cloro del agua, los tintes, etc.
Los pelos de los mamíferos sirven para proteger el cuerpo del frío y del calor. Además, los pelos protegen contra los golpes, las rozaduras y las picaduras de insectos. Las pestañas protegen los ojos del polvo. Los pelos de la nariz hacen de filtro del aire que entra a las fosas nasales. Las cejas protegen los ojos de las gotas de sudor.
Los mamíferos están cubiertos de pelo
Los mamíferos estamos cubiertos de pelos que nacen de la piel. Pero los humanos no tenemos un pelamen uniforme, porque hemos ido perdiendo una parte durante la evolución. Conservamos pelo largo en el cabello y en la barba de los hombres. El resto del cuerpo (excepto las palmas de las manos y de los pies, y los labios) lo tenemos recubierto de millones de pequeños pelos llamados vello corporal. El pelo está formado de fibrillas de queratina que, dependiendo de su estructura, dan lugar al pelo liso o rizado. El color del pelo se debe a un pigmento llamado melanina.
El experimento: resistencia de un pelo
Materiales
Pelos largos, cinta adhesiva, cuchara, botellín de agua
Proceso
Coge un pelo largo de alguien de la familia, que tenga al menos un palmo de longitud. Rodea el mango de una cuchara con varias vueltas de pelo, y pega un trozo de cinta adhesiva para que el pelo quede bien sujeto y no se resbale al estirar de él. Con la otra punta del pelo rodea la boca de un botellín vacío y pega otro trozo de cinta adhesiva. Levanta la cuchara y comprueba que el botellín se queda colgando del pelo. Después, echa un dedo de agua en el botellín, que pesará aproximadamente 50 gramos. Deja colgando de nuevo el botellín. El pelo no se rompe. Vuelve a echar una cantidad igual de agua, lo que sumará un peso de unos 100 gramos. Levanta ahora el botellín. Lo más probable es que ahora sí se rompa el pelo, pues la resistencia de los pelos suele ser entre 50 y 100 gramos. Prueba con pelos de otra persona.
