En el CEIP Nicolás de las Peñas y Suceso pintan sueños

Enmarcada en el proyecto ‘MurciArte’ que combina dibujo, pintura, TIC y educación emocional, desarrollar las habilidades artísticas del alumnado de Infantil a través de la vida y obra del artista murciano Alvaro Peña ha sido el objetivo de esta situación de aprendizaje que han llevado a cabo en el CEIP Nicolás de las Peñas y Suceso de Aledo (Murcia). Nos lo cuentan las docentes Ana María Redondo Rocamora y María Hernández Martínez.

Tiene como finalidad principal abordar las artes plásticas desde un enfoque competencial globalizador e inclusivo, utilizando metodologías activas, donde la investigación será un aspecto fundamental, requiriendo pensamiento crítico, resolución de problemas y colaboración.

A la vez, se busca la adquisición de habilidades para gestionar eficazmente las emociones.

Este recorrido se llevará a cabo a través del arte y el desarrollo de las emociones a través del mismo.

La importancia de la prevención emocional en los niños y niñas juega un papel crucial en su desarrollo integral, y alinearse con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) es, señalan, esencial para impulsar acciones significativas en este ámbito. En particular, el ODS número tres, ‘Salud y Bienestar’, resalta la importancia de promover una vida saludable y el bienestar mental de todas las situaciones de aprendizaje.

Durante el desarrollo de la actividad, en el CEIP Nicolás de las Peñas y Suceso han explorado la vida y obra de Álvaro Peña, despertando el interés hacia los saberes básicos artísticos a través de las temáticas que recogen sus obras y las técnicas plásticas utilizadas, las emociones que expresen y las manifestaciones culturales de su entorno.

La secuencia competencial se establece a través de tres procesos y siete retos en los que utilizan las «rutinas de pensamiento», cuyo objetivo es que los alumnos aprendan a reflexionar, sean capaces de observar varios puntos de vista y ganen en autonomía.

En el primero proceso, ‘El enigma’, el alumnado realizará varias actividades con objeto de conectar con sus conocimientos previos, reflexionar sobre el poder transformador del arte y su carácter crucial en la construcción de un mundo más justo, equitativo y sostenible.

En el primero reto, ‘La foto’, el alumnado al llegar a clase se encuentra en el suelo una foto de una persona, y empieza a describir lo que ve: ¿es hombre o mujer? ¿De qué color tiene el pelo y los ojos? ¿Cómo va vestido? ¿Qué hay al fondo?... Aunque podría ser un pintor, no están muy seguros. ¡Sorpresa! detrás de la foto hay un código QR que los lleva a una grabación donde Álvaro Peña les informa de que forma parte del colectivo ArtNostrum, cuyo objetivo es ayudar a exportar el arte murciano fuera de la Comunidad y de España. Están organizando una exposición para dar respuesta a la pregunta: ¿cómo puedo contribuir, desde mi trabajo artístico, a reducir el impacto medioambiental? Les propone el reto de crear sus propias obras de arte y colaborar en esta experiencia y los alumnos lo aceptan.

Para el segundo reto, ‘¿Quién será Álvaro Peña?’, se necesitó la participación de las familias, ya que se les pidió que buscaran en casa junto a sus hijos información sobre el pintor y dos de sus obras: ‘El elogio del corazón’ y ‘Sostenibilidad en el vacío’. Para buscar esta información podían utilizar cualquier medio a su alcance. El día que se realizó la actividad en el aula los niños fueron saliendo por parejas para contar a sus compañeros lo que habían investigado y aprendido. Cada uno trajo una imagen de la obra sobre la que le había tocado informarse y explicó a sus compañeros lo que veía en ella y lo que más le gustaba.

En el proceso dos, ‘¡Manos a los pinceles’, se pretende que el alumnado desarrolle una diversidad de acciones que permiten poner en práctica los principios a los que se ha comprometido a través de su participación en la creación del museo.

En el reto tres, en asamblea, presentaron la obra ‘Elogio de corazón’, fijándose en los colores, las formas, las personas... y en el corazón. Se propuso a los niños convertirse en Alvaro Peña y pintar, crear, soñar en grupo en el rincón de la creatividad: rellenan la base de colores utilizando un pincel mágico y un cartón reutilizable, realizan un collage con superposiciones utilizando materiales reciclados...

El reto cuatro consistió en un puzle interactivo de ‘Elogio de corazón’.

En el quinto reto se trabajó la obra ‘Sostenibilidad en el vacío’, y en el sexto trabajaron el nombre del artista y elaboraron una línea de tiempo con momentos importantes en su vida.

Por último, organizan una exposición en la que con un código QR en cada lámina se accederá a un audio, narrado por los niños, sobre el proceso de creación.

Finalmente, el alumno difunde la actividad entre la comunidad educativa utilizando todos los medios a su alcance y se reúne en asamblea para comentar qué les ha parecido la experiencia, si hay algún aspecto que les gustaría mejorar, si lo habrían hecho de otra manera, para ser personas autocríticas y poder así mejorar.