Murales que dan vida

Desde pequeño siempre me ha parecido muy importante conocer idiomas, no solo desde el punto de vista profesional o turístico, sino como punto de encuentro intercultural que permite poder conocer mucho más de cerca otras tradiciones y otras costumbres de punta a punta del planeta.

Los idiomas nos permiten conocer no solo la forma de hablar, sino también nos permiten, a través de sus diferentes vertientes culturales, como la música, la pintura o el cine, poder conocer cómo viven en otros lugares.

Conscientes de ello, las escuelas oficiales de idiomas desarrollan todo tipo de actividades que complementan el estudio del idioma en todos sus puntos de vista, para que el alumno identifique mucho más la lengua que pretende aprender.

En Cartagena, como en otros lugares de la Región, tenemos una escuela oficial de idiomas, destacando que en la ciudad portuaria su sede actual se encuentra situada en el barrio de El Ensanche y fue inaugurada en el año 2003. Se trata de un edificio que, por su estilo arquitectónico, suele pasar bastante desapercibido.

Por ello, es intención de este equipo directivo desarrollar todas las actuaciones posibles para dar mayor visibilidad al centro, garantizando una mayor repercusión entre nuestros conciudadanos.

Durante la pasada semana el artista cartagenero Jose María Vidal, muy conocido por ser el creador del proyecto ‘Calima Proyectos Pictóricos’, ha realizado un mural en la Escuela Oficial de Idiomas de Cartagena con la colaboración técnica de Willy Arenas.

La realización de este proyecto ha sido gestionada por parte de la Asociación de Alumnos y Amigos de la EOI y ha sido posible gracias a la colaboración de distintas entidades locales, entre ellas la Autoridad Portuaria de Cartagena.

El objetivo de la obra es resaltar este vínculo: se trata de la imagen de una mujer que, a través de un soplo de aire, empuja un barco, simbolizando la apertura al mundo de la ciudad por medio de los idiomas.

Esta figura alegórica está rodeada por distintos elementos naturales que se funden entre sí: el sol, el mar y el cielo, que representan nuestra ciudad y cuyos colores están reflejados en nuestro logo.

Gracias a los murales que se han realizado, esperan que la escuela se convierta en un edificio emblemático de la ciudad, fácilmente reconocible para cualquiera de nuestros conciudadanos.