Suicidio juvenil

Recientemente, a través del Instituto Nacional de Estadística, hemos conocido que la cifra de jóvenes de 11 a 21 años que acaban con su vida ha aumentado casi el doble en la Región de Murcia.

Estos datos estremecen, y ponen en alerta a todos los profesionales que trabajan en el ámbito de la prevención del suicidio para atajar cuanto antes uno de los problemas de la sociedad actual, que supone la primera causa de muerte no natural en todas las edades, por encima incluso de los accidentes de tráfico.

Sin duda queda mucho trabajo por hacer, y todo tipo de profesionales pueden arrimar el hombro en el ámbito de la prevención del suicidio.

Además de psicólogos o psiquiatras, dentro de sus área de actuación tienen un papel muy importante los educadores, los abogados, los periodistas o los criminólogos.

El suicidio es uno de los factores más que, unido a los cambios físicos, emocionales y sociales, puede provocar que los adolescentes se encuentren mucho mas expuestos que otros sectores poblacionales, al ser considerada la etapa de la vida donde las personas se enfrentan a numerosos cambios, algo que puede suponer un conflicto y un riesgo para la salud mental.

Existen diversas cuestiones que hay que atender para prevenir el suicidio en niños y adolescentes, destacando las siguientes:

- Reconocer que los trastornos depresivos y de salud mental pueden ocurrir también en niños y en adolescentes.

- Controlar que los adolescentes no tengan acceso a los instrumentos que faciliten la consumación del suicidio.

- Revisar los signos que muestren que algo no va bien en el niño o el adolescente y que puedan ser el origen de sentimientos de aislamiento y soledad.

- El diagnóstico adecuado y a tiempo por un especialista puede llevar consigo la detección de un problema que puede ser solucionado evitando males mayores.