Las recomendaciones de las Consejerías de Educación de las comunidades autónomas para reducir el riesgo de contagio de covid-19 son: ventilación natural cruzada, reducción de aforos y uso de mascarillas. También es recomendable abrir las ventanas 15 minutos al entrar en las aulas, con los cambios de clase y mantener la ventilación continua en los aseos.

Para ello, y con objeto de aunar el confort térmico y la eficiencia energética, los medidores CO2 en colegios y universidades son un elemento clave para analizar la calidad del aire, conocer los niveles de ventilación y poder mandar un aviso inmediato a los responsables del centro o a los profesores afectados. El objetivo es ventilar las aulas cuando sea necesario y mantener una temperatura que no baje de los mínimos aceptables.

SENSONET recomienda que para mantener el confort térmico se marque como objetivo tener un nivel de CO2 entre 500ppm y 800ppm en las aulas. Pero, una vez sobrepasado el valor de 800 ppm, aunque suponga una pérdida del confort térmico en invierno, se debe realizar una ventilación cruzada. Lo ideal es que cuando haya un aforo completo en el aula no se mantengan periodos prolongados de tiempo con valores mayores de 1000ppm.