El Prisma

Sabe que la tiene hecha

Pablo Molina

Pedro Sánchez no ha visitado Murcia en la recta final de la campaña electoral. Por algo será. Muy probablemente porque sus asesores son conscientes de que el resultado para el PSOE en esta región no se va a mover de manera apreciable con un mitin del presidente. Más bien ocurriría lo contrario, que es el otro efecto que las visitas de Sánchez provocan en el electorado en aquellas provincias damnificadas, real o ficticiamente, con su acción de Gobierno.

Pero lo que parece evidente es que el PSOE nacional da por amortizada la Región de Murcia y se conforma con los tres diputados socialistas que los murcianos aportan al Parlamento. El que aquí lleven sin gobernar tres décadas (y subiendo) les da exactamente lo mismo. Y a los socialistas murcianos, también. 

Así se las ponían a Fernando, el otro.

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