Tras un año en que 'Pasapalabra' ha hecho sin duda historia, el programa se enfrenta al 2024 con muchos retos por delante. Además de la impresionante victoria de Rafa Castaño en marzo, con la que se repartió el mayor bote de la historia del concurso; el año ha estado plagado de récords y primeras veces. Pero no todos han sido necesariamente positivos.

Si hay un programa importante para la televisión en España, ese es 'Pasapalabra'. Aunque suele haber pocas polémicas que rodeen a la emisión de este concurso, recientemente se ha descubierto como uno de los concursantes hacía trampas de forma que se ha tenido que detener el curso normal del episodio.

Además de esta incidencia reciente, hace escasos días que el Tribunal General de la UE desestimaba el recurso de MC&F sobre la prueba 'El Rosco' de 'Pasapalabra', zanjando una de las mayores polémicas que orbitan en torno al programa y reconociendo a ITV como creadora y propietaria.

La decisión del Tribunal General de la UE, además de acallar los rumores, tiene un impacto directo en el debate de España: y es que, momento, cierra la puerta a que el programa conducido por Roberto Leal vuelva a Telecinco, afianzando su lugar en Antena 3.

Hace trampas en 'Pasapalabra' y lo pillan

La dinámica de 'Pasapalabra' está clara y, tras los más de veinte años emitiéndose, hasta el más nuevo la tiene clara: a lo largo de la hora que dura el programa, los aspirantes a llevarse el bote acumulado hacen dos equipos que juegan varias pruebas en las que se acumulan segundos que después serán el tiempo que los concursantes tendrán para resolver correctamente las veinticinco letras de 'El Rosco'. El concursante que primero complete correctamente todas las definiciones de 'El Rosco' será quien se lleve el bote acumulado -que actualmente supera el millón de euros-. En caso de agotar el tiempo o fallar alguna respuesta, el concursante se medirá en el próximo programa para volver a intentarlo.

Recientemente, la dirección del programa decidió llevar a cabo una modificación que no terminó de gustar a los espectadores: se trataba de sustituir la famosa prueba 'Sopa de letras' por un nuevo reto, 'Palabras cruzadas'. La primera crítica a esta decisión llegó por la reducción del tiempo del que finalmente disponen los concursantes, que será menor con el nuevo reto.

Pero, además de las críticas a la sustitución del juego, también se ha denunciado que el diseño de la nueva prueba tiene serias deficiencias en cuanto a accesibilidad y que dificulta la visión a los espectadores con problemas de la vista.

En esta ocasión, Roberto Leal ha tenido que enfrentarse a una situación nunca vista antes. Una escena completamente impensable: "No se puede hacer esto, son las normas de 'Pasapalabra', no había pasado nunca" ha sido la amonestación que le ha dedicado el presentador a Javier ante la fechoría que ha perpretrado.

La situación se dio en la prueba '¿Dónde están?'. Todo sucedía tal y como estaba previsto: Leo Harlem y Ana Torroja trataban de revelar cuáles eran las palabras escondidas detrás de las casillas. Fue entonces cuando irrumpió Javier con 13 segundos de adelanto. Cuando solo le quedaban cuatro palabras por responder, sucedió algo nunca antes visto: decidió quedarse callado mientras corrían los cuatro segundos que le quedaban.

Bajo la mirada atónita de Ana Torroja, Javier se justificó aclarando que lo hacía así por una buena razón: "Mejor empatamos. Si hubiera fallado habría perdido todos los segundos".

Pero esta pequeña trampa que debería haber quedado entre los dos jugadores trascendió a oídos de Roberto Leal que rápidamente tomó cartas en el asunto: "Realmente habrían sido cinco aciertos, pero el último te lo tengo que dar como error porque acaba de ocurrir una cosa, que has tardado más de cuatro segundos en responder". Así, el periodista sevillano aclaró: "Cuando no tenéis tiempo, un cronómetro o un reloj es para que no se hagan posibles estrategias a la hora de guardar el resultado, por lo tanto, tienes cero aciertos".