Antes de preparar las maletas, decide donde vas a acampar e infórmate sobre los servicios que ofrece y las condiciones climatológicas que imperan. Así, podrás saber lo que te vas a encontrar allí y lo que necesitas llevar de casa y, por supuesto, te permite elegir las prendas de ropa más adecuadas. 

Montar y desmontar la tienda de campaña puede parecer una tarea fácil, pero es recomendable que practiques con tranquilidad antes de lanzarte a la aventura, sobre todo si se trata de una tienda grande que requiere de varillas para su montaje. Limpia de piedras y ramas la parcela en la que vayas a establecer tu tienda para evitar incomodidades cuando vayas a dormir. 

Haz una lista con todo lo que puedas necesitar: saco de dormir, repelente de insectos, ropa cómoda y zapatos de deporte, utensilios de cocina, mesas y sillas o protecciones contra el sol si es verano. Además, piensa en herramientas que puedan resultar útiles, tales como linternas, un pequeño botiquín, una cuerda o cinta americana, un martillo para asegurar la tienda de campaña sin esfuerzo o una batería extraíble para cargar dispositivos electrónicos. 

No te olvides de bolsas de basura para dejar el lugar limpio y poder transportar equipaje sucio o mojado, como deportivas o ropa. Otros extras de acampada que pueden hacer más llevadera tu experiencia son un inflador, un camping gas, una nevera y formas de entretenerte sin cobertura como, por ejemplo, una baraja de cartas o un libro. 

En verano es muy importante adaptarse a las horas de luz. Si la tienda de campaña no se ubica a la sombra, unas horas después de que salga el sol se convertirá en una sauna. Con las altas temperaturas también hay más riesgo de provocar incendios, por lo que debes asegurarte de no dejar nada inflamable fuera de la tienda. Otro factor con el que debes tener cuidado es la comida, ya que puede atraer a toda clase de animales, desde insectos hasta grandes mamíferos. 

Recuerda que tendrás que transportar hasta la zona de acampada todo el equipaje que decidas llevar, por lo que es bueno ser previsivos, pero ten en cuenta qué objetos son más prioritarios y asegúrate de llevarlos contigo al paraje natural que será tu hogar durante unos días.