Escenario tras el 12-M

El Govern catalán asume el batacazo electoral y se prepara para una interinidad larga

El presidente no aclara aún qué día tiene previsto convocar el pleno de constitución del Parlament

El presidente de la Generalitat de Cataluña y candidato de ERC a la reelección, Pere Aragonès.

El presidente de la Generalitat de Cataluña y candidato de ERC a la reelección, Pere Aragonès. / David Zorrakino - Europa Press

Quim Bertomeu

Martes extraño en el Palacio de la Generalitat. Todo ha ido como siempre, pero nada ha sido igual. El Govern se ha reunido como todos los martes, pero lo ha hecho por primera vez desde el batacazo electoral de ERC en las elecciones del domingo que hará que el actual ejecutivo tenga que dejar paso a un gabinete liderado por otro partido. Este Govern, por lo tanto, tiene fecha de caducidad. Eso sí, en la Generalitat tienen la sensación de que este relevo "va para largo" y que existe un riesgo de bloqueo institucional y, en consecuencia, de que se tenga que repetir las elecciones.

La encargada de dar la cara ha sido la portavoz del ejecutivo, Patricia Plaja. Esto ha sido así porque el president, Pere Aragonès, ya compareció el lunes para valorar los resultados y para anunciar su retirada de la primera línea política. Plaja ha admitido que "no son unos buenos resultados" para "el proyecto independentista y de izquierdas" que encarnaba el Govern de Pere Aragonès. Además, ha lamentado las bajas cifras de participación. Para la Generalitat, los resultados muestran que hay una "desafección" de los ciudadanos hacia la política, además de que Catalunya ha virado "a la derecha".

Pese a que tenga fecha de caducidad, no está claro que este Govern tenga que hacer tan pronto las maletas. Los resultados del 12-M son endiablados y será complicado que se conforme una mayoría para investir a un nuevo president. Plaja ha admitido que este es uno de los escenarios porque "la aritmética es complicadísima" y "no hay ninguna mayoría clara". Ante esta situación, Aragonès ha pedido a los consellers que "sigan ejerciendo sus responsabilidades" has el último día. Es decir, que pese a la interinidad actual, los departamentos tienen que seguir funcionando hasta que se produzca el relevo.

Plaja sí que tratado de poner algo de presión al PSC y a Junts para que lleguen a un acuerdo. Así, ha dicho que no sería bueno para Catalunya "alargar la provisionalidad", por lo que ha pedido que negocien "aquellos que puedan hacerlo". También les ha reclamado que hagan aquello que tengan "a su alcance" para llegar a un acuerdo. Siguiendo el marco mental que intenta fijar ERC, la portavoz ha apuntado a que la responsabilidad de pactar es de socialistas y posconvergentes y ha obviado que los republicanos también tienen un papel importante para el desbloqueo.

Factura de la repetición: casi 30 millones

Para aumentar esta presión al PSC y a Junts, Plaja ha recordado que la repetición electoral tendría un coste para el bolsillo de los contribuyentes. Los comicios del domingo costaron 30 millones y, en caso de repetirse, la portavoz ha asegurado que la factura sería "algo menor", pero no mucho menos.

Aunque las elecciones no le fueran como esperaba, el escenario postelectoral aún le ha reservado algo de protagonismo a Aragonès. Él tiene la responsabilidad de decidir la fecha de constitución del Parlament con el límite del lunes 10 de junio. Plaja no ha aclarado qué día el president tiene decidido convocar a la cámara. En ese pleno los partidos tienen la responsabilidad de llegar a acuerdos para elegir al presidente del Parlament y al resto de miembros de la mesa.

La fecha tiene miga porque el 9 de junio hay elecciones europeas y difícilmente a ningún partido le interesa llegar a pactos con otros en plena campaña electoral. Es por esto que, todo hace pensar, que al president le interesará convocar el pleno el 10, cuando ya hayan transcurrido los comicios europeos. Sin embargo, por ahora, no da ninguna pista sobre qué piensa hacer.