Puigdemont se instala en el sur de Francia como paso previo a su regreso tras las elecciones del 12M

El expresident y de nuevo candidato de Junts a la Generalitat, Carles Puigdemont, ha dado por cerrada su etapa en Bélgica. La convocatoria anticipada de elecciones catalana ha cambiado radicalmente sus planes y desde esta Semana Santa ya no vive en Waterloo, donde se instaló en 2017 cuando abandonó Cataluña tras la declaración unilateral de independencia fallida y la supresión de la autonomía catalana con la aplicación del artículo 155 de la Constitución. Según explican fuentes de Junts, se ha instalado en el sur de Francia. Concretamente, ha establecido su domicilio en la comarca del Vallespir, a escasos quilómetros de la frontera.

Desde allí hará buena parte de la campaña de los comicios del 12 de mayo, evitando las pantallas que han protagonizado los periodos electorales que ha habido desde su marcha y a los que ha concurrido, como los de 2017 o 2021, además de las europeas, y desde allí también acabará de planificar su regreso a Cataluña. Como ya explicó en el momento en que hizo el paso de presentarse como candidato, Puigdemont prevé estar presente en la sesión de investidura en el Parlament que, a más tardar, deberá celebrarse el 25 de junio en primera instancia.

Aunque aún tendrá que desplazarse de nuevo a Bruselas y a Estrasburgo en las próximas semanas para asistir al Parlamento Europeo, del que sigue siendo miembro, el campo base de Puigdemont está en el Vallespir, donde ya realiza reuniones y actos con la vista puesta en la campaña electoral. Este mismo sábado, presentará la candidatura de Junts+ Puigdemont per Cataluña en el municipio de Elna, con la previsión de que asistan más de un millar de personas.

Con este movimiento, Puigdemont quiere evidenciar que estas no serán unas elecciones como las de 2021. Entonces, el expresident optó por encabezar la candidatura, pero lo hizo como un acto básicamente simbólico, ya que en ningún momento se planteó ni que optara a la presidencia ni que cogiera el acta de diputado al Parlament que, además, no es compatible con la de la Eurocámara. Puigdemont, que hizo campaña básicamente por videoconferencia, ocupó el número uno de la lista, pero la candidata efectiva fue Laura Borràs.

Ahora el expresident plantea los comicios como una oportunidad de subsanar la aplicación del 155 y restituirle como president de la Generalitat. Para hacerlo, espera poder volver a Cataluña una vez la ley de amnistía entre en vigor y decaigan las órdenes de detención que pesan sobre él. El juez tienen dos meses para hacerlo efectivo a partir del momento en que la norma aparezca en el Boletín Oficial del Estado (BOE), por lo que los posconvergentes creen que hay tiempo suficiente para que Puigdemont cruce la frontera antes del 25 de agosto, fecha límite en que se debe investir un presidente antes de la convocatoria automática de elecciones.

También bajo esta estrategia debe interpretarse la lista confeccionada por Puigdemont y el hecho de que haya situado como número dos una independiente, a la empresaria Anna Navarro, disipando las especulaciones de que pudiera ser la candidata efectiva.

Sin embargo, el expresident sí ha apostado por un número tres fuerte y del partido como Josep Rull, para que pueda capitanear en su ausencia y acudir a los debates con otros candidatos. Le acompañará la presidenta del Parlament, Anna Erra, que ocupará el cuarto puesto y le seguirán otras primeras espadas como el presidente del grupo en la Cámara catalana, Albert Batet, en el quinto lugar, y el vicepresidente y portavoz de las siglas Josep Rius, que será el séptimo.

También entre los otros nombres que tienen muchas papeletas de obtener representación en el Parlament está el del 'exconseller' Jaume Giró (aparece en el puesto número 11), dando así también espacio al sector más pragmático del partido; y el del también exmiembro del Govern Lluís Puig (en el número 13), actualmente en Bruselas, desde donde ya ha ejercido como diputado de la Cámara catalana esta legislatura. Además, de Navarro, Puigdemont también ha fichado a la escritora Enatu Domingo, de número seis, y al historiador Agustí Colomines, número nueve de la lista, aunque en su caso siempre ha estado muy vinculado a este espacio. De hecho, se trata más de una 'repesca' que un fichaje como tal.

En cambio, los afines a Borràs han perdido peso en la candidatura final. Francesc de Dalmases -su mano derecha- ocupará el número 18 (en 2021 ocupó el 15) y David Torrents escala posiciones hasta el puesto 23 (concurrió con el número 27 hace tres años), pero no están en la lista Aurora Madaula ni Cristina Casol, que en los últimos meses han estado en el centro de la polémica por sus denuncias de acoso contra la cúpula del grupo parlamentario, que el partido siempre ha considerado discrepancias políticas. De hecho, Casol fue expulsada del partido. Tampoco Jaume Alonso Cuevillas, que dejó la Cámara voluntariamente hace unas semanas ni Ester Vallès, otra de las diputadas que se le consideraba afín.