La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha mostrado la "absoluta indignación" del Gobierno por la decisión del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, de suspender las negociaciones de la renovación del Poder Judicial con otro pretexto que demuestra una vez más, ha dicho, que "nunca" ha querido renovar el CGPJ y sí seguir incumpliendo "flagrantemente" la Constitución.

En declaraciones en TVE, Robles ha calificado de "día negro para el Estado de derecho" la suspensión de estas negociaciones por parte del PP con el argumento de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mantiene la intención de reformar el delito de sedición.

"Lo que está claro es que Feijóo nunca quiso renovar el CGPJ, las razones no las sé. Si es por las presiones de la extrema derecha o porque sencillamente no cree en el Estado de derecho y la Justicia y me duele decirlo así", ha recriminado duramente la ministra Defensa, que ha calificado de "increíble" el comunicado del PP y ha opinado que su líder "no tiene altura política".

Robles ha asegurado que la negociación estaba "cerrada" y se ha puesto como "excusa" el delito de sedición "como podía haber sido otra".

"Me molesta que nos quieran dar lecciones de sentido de Estado diciendo que se está poniendo de riesgo. Estoy un poco cansada de quienes quieren patrimonializar España, su símbolos, las fuerzas armadas o la defensa del Estado. A España no la defiende del PP, la defendemos todos, lecciones sobre defensa del estado no son aceptables", ha enfatizado.

Preguntada sobre la posibilidad de reconducir nuevamente las negociaciones, Robles ha opinado que deberá responder Feijóo. "¿Qué es eso de suspender, no tendrían que estar en este proceso", ha reprochado la ministra antes de recordar que son ya cuatro años de bloqueo en la renovación, lo que demuestra "una falta total y absoluta de sentido de estado" y una "ofensa permanente a la Justicia".

"No es aceptable que el PP esté atacando el estado de derecho con lo está haciendo", ha reiterado Robles.

Preguntada sobre la filtración de la conversación telefónica que Sánchez mantuvo con Feijóo este jueves y en la que supuestamente el presidente del Gobierno le confirmó la reforma del delito de sedición la ministra ha dicho que las conversaciones privadas "no se tienen por qué airear" por quedar bien "no se sabe con quién".

Aunque para Robles, "lo peor" y "más grave", es la vulneración permanente de la Constitución "con absoluto descaro y sin recato". "Es algo incomprensible que no se puede aceptar", ha insistido.