El mayor complejo geriátrico de Murcia estará en Santa Catalina

El incremento de la esperanza de vida es uno de los grandes logros del estado del bienestar, pero también conlleva un reto social y sanitario que la sociedad no puede soslayar. Aunque Murcia no es una de las comunidades españolas más envejecidas, la Región tiene un déficit de 6.749 plazas en residencias de mayores, según un informe de la Asociación de Directores y Gerentes de Servicios Sociales. En el caso de la capital, se estima que faltaban en 2023 cerca de 1.000 plazas para al menos acercarse a la media nacional. Mientras las administraciones públicas se ponen las pilas para recortar la distancia con el resto de España, la iniciativa privada en este ámbito se presenta como un aliado indispensable .

Entre los proyectos que hay en marcha en el municipio, destaca con luz propia el proyecto de la sociedad promotora murciana Vescovo & Kuma para levantar en un gran solar de unos 35.000 metros cuadrados de la carretera de Santa Catalina un impresionante complejo asistencial geriátrico de altas prestaciones con 275 plazas, con servicios propios de un hotel de lujo (zonas lúdicas, restaurantes, club social, piscina exterior e interior, galería comercial e incluso mini golf o una bolera huertana, entre otros muchos recursos) y con cerca de 3.000 metros cuadrados de zonas verdes y hasta dos plantas de parking. El centro, con un presupuesto de ejecución de 55 millones de euros, dispondrá de 207 plazas para residentes, 32 poshospitalarias y 34 de salud mental. Las habitaciones privadas permanentes dispondrán de cerca de 70 metros cuadrados con amplias terrazas. Las habrá permanentes y temporales, estas últimas para aquellas personas que necesiten rehabilitación después de sufrir cualquier intervención quirúrgica o cualquier otro incidente. Entre las concertadas, también habrá estancias poshospitalarias, que contarán con una atención más intensiva.

Según la sociedad promotora, se trata de un nuevo modelo de residencia geriátrica único en Europa «dotado de todos los servicios asistenciales y médicos y en el que nuestros mayores podrán disfrutar de una absoluta calidad asistencial en un entorno familiar, dejando atrás el concepto obsoleto de ‘asilo de ancianos’».

El proyecto, que ha sido ejecutado por el prestigioso estudio de arquitectura Raúl Torres y Asociados, tendrá un fuerte cariz sanitario. El complejo integrará un área de cuidados hospitalarios, que ofrecerá a los residentes la asistencia médica que necesiten, evitando así desplazamientos a otros centros. Además, el personal incluirá un equipo multidisciplinar para una atención médica primaria, servicio de enfermería, psicología, fisioterapia y terapia ocupacional. Por otra parte, el servicio médico de la residencia desarrollará programas de prevención y promoción de la salud, exploraciones, análisis clínicos y labores de coordinación con servicios exteriores con especialistas.

Aunque pueda parecer que este complejo geriátrico es un retiro dorado sólo al alcance de los bolsillos más abultados, desde la promotora aseguran que los precios no se han disparado y se van a equiparar a la media nacional: sobre los 3.000 euros por plaza, pero hay que tener en cuenta que muchas de ellas podrán ser concertadas con el IMAS si los usuarios cumplen los requisitos.

Con respecto a la empresa que gestionará esta macroresidencia, desde la promotora explican que todavía no se ha tomado una decisión, aunque han dejado caer que Adeslas se encuentra en este momento en una posición muy ventajosa, aunque admiten que otras grandes empresas del sector también han mostrado interés y han ofrecido servicios muy interesantes. «No hay nada cerrado», señalan desde Vescovo & Kuma.

En este momento el proyecto ya cuenta con el visto bueno de la Comunidad (han estado implicadas hasta seis consejerías), y ahora sólo resta que el Ayuntamiento de Murcia, a través de la Concejalía de Urbanismo, expida la correspondiente licencia de obra. Si nada se tuerce, los trabajos podrían comenzar en enero de 2025. El plazo de ejecución previsto es de 30 meses, por lo que la inauguración del complejo podría llegar para mediados de 2027.

Se espera que este macrocentro asistencial genere 150 empleos directos. En cuanto a la ejecución de las obras, aunque en un primer momento se planteó apostar por las constructores locales, las complejidad de las actuaciones hace indicar que será una gran constructora nacional quien se encargue de la ejecución.