Cultura

El Bando Panocho será declarado Bien de Interés Cultural

La Consejería de Cultura arranca la incoación del expediente para uno de los emblemas de la cultura y de la huerta murciana

El Bando Panocho será declarado Bien de Interés Cultural

Pablo Fernández

Alejandro Lorente

Alejandro Lorente

La Consejería de Cultura anunciará mañana la incoación del expediente de Bien de Interés Cultural del Bando Panocho, uno de los emblemas de la cultura del municipio y una de las manifestaciones más conocidas del lenguaje propio de la Huerta de Murcia. Según ha podido saber esta Redacción, la iniciativa ha sido promovida por la Asociación Cultural L’Ajuntaera, que tiene como objetivo el reconocimiento y la protección del murciano, o conjunto de las hablas murcianas, «pues junto a la literatura en murciano constituye un patrimonio de la región que no se debe perder», según aparece en la descripción de la web de este colectivo.

Para el presidente de la Federación de Peñas Huertanas, Juan García Serrano, la futura declaración de interés cultural es algo que le parece «muy interesante, todo un acierto, una cuestión que debía caer tarde o temprano sobre su propio peso, algo que forma parte de la cultura de esta tierra».

Asegura que la Federación que preside colabora estrechamente con L’Ajuntaera, y fruto de esa colaboración se ha recuperado la tradición de entregar las panochas de oro, plata y bronce a los ganadores de los certámenes de bandos panochos. Las bases de estos certámenes indican que el Bando Panocho debe estar escrito «en lenguaje de la huerta (panocho) y en romance, versos octosílabos con rima asonante los pares y libres los impares».

«Agradecemos que la consejera de Turismo y Cultura, Carmen María Conesa, haya dado este paso que es importante en favor de nuestras raíces y nuestras señas de identidad», indica el presidente de las peñas huertanas, que recuerda que la publicación del Bando Panocho se remonta a los mismos inicios de la gran fiesta murciana.

Admite que la denominación de ‘panocho’ no acaba de encajarle, y que prefiere referirse a este lenguaje como el «habla de la huerta de Murcia».