Entrevista | Ana Alba Lorente Graduada en Derecho y máster en Acceso a la Abogacía

"Es imprescindible educar a los jóvenes en la importancia de la lucha contra la violencia de género"

Siempre que la gravedad del caso permita una mediación entre agresor y víctima en un caso de violencia de género, cabe la posibilidad de encontrar beneficios tanto a la hora de concienciar a una parte, como de restaurar los daños sufridos por la otra 

La Unidad para la Igualdad de la UMU le ha reconocido recientemente con el premio al mejor Trabajo Fin de Máster

Ana Alba Lorente.

Ana Alba Lorente. / Alfonso Durán

Javier Vera

Javier Vera

Los ámbitos legislativo y judicial deben seguir dando pasos para hacer de la lucha contra la violencia de género una herramienta útil a la hora de alcanzar una igualdad real y efectiva entre hombres y mujeres. Afortunadamente, la investigación en el ámbito universitario también suma su grano de arena para este propósito.

¿Qué le llevó a graduarse en Derecho y especializarse en Acceso a la Abogacía en la Universidad de Murcia?

El sentido de la justicia es, sin duda, uno de los pilares que hacen que nuestra sociedad funcione y progrese. Prácticamente toda nuestra actividad necesita ser regulada de alguna forma para evitar el caos, el abuso y la injusticia. En este sentido, el Derecho regula una serie de garantías para asegurar la igualdad de todos ante la ley, y eso es lo que me llevó a estudiarlo: el deseo de conseguir un proceso justo para todos, evitando así el predominio del poderoso sobre el más débil.

Recientemente ha sido reconocida por la Unidad para la Igualdad entre Mujeres y Hombres de la UMU en los premios a los mejores trabajos de investigación sobre igualdad y violencia de género. ¿Cómo recibe este reconocimiento?

Con mucha gratitud, pues durante la realización de este TFM me planteé, por primera vez, la investigación como salida profesional, y que reconozcan tu trabajo de esta manera con un tema tan controvertido significa que voy por el buen camino y que puedo aportar mi granito de arena en la lucha contra la violencia de género; así que puedo decir que ha sido un honor y un orgullo.

En su trabajo ‘Mediación penal y violencia de género’ se habla de asimetrías del sistema judicial en el ámbito de la violencia de género. ¿Cuáles son estas desigualdades?

Nos encontramos en un momento en el que los instrumentos restauradores están ganando cada vez más peso, mostrando la necesidad de otorgar un mayor protagonismo a la víctima. De hecho, en el ordenamiento jurídico español se contempla la posibilidad de aplicar procedimientos de justicia restaurativa como la mediación siempre que se cumplan una serie de requisitos con el objetivo de que la víctima obtenga una reparación material y moral adecuada a los perjuicios sufridos derivados del delito.

Sin embargo, este impulso se ha visto frenado en el ámbito de la violencia de género porque el legislador ha decidido prohibir la mediación penal en este tipo de violencia.

¿Por qué actualmente no se contempla en España la opción de la mediación penal en casos de violencia de género?

Las voces más críticas con la prohibición de mediar en estos casos consideran que la Ley Orgánica de Violencia de Género es una ley sobreprotectora y paternalista con las víctimas de estos delitos por considerarlas incapaces de intervenir en un proceso de mediación, asumiendo el arquetipo de víctima incapaz de pensar por sí misma y en su propio interés.

¿En qué supuestos podría entonces ser útil esta mediación?

Es preciso diferenciar entre aquellos supuestos en los que exista una historia prolongada de violencia, agresiones y dominación, en las que un acercamiento entre víctima-agresor supusiera un peligro para la víctima y sería imposible llegar a un acuerdo justo y equilibrado, de aquellos episodios esporádicos de violencia machista, como insultos, agresiones físicas únicas, incluso mutuas, de carácter leve.

"El 8M es una forma de recordarnos el largo camino que otras mujeres recorrieron por nosotras y que ahora debemos continuar para conseguir una igualdad real y efectiva"

¿Qué beneficios podría tener, tanto para agresor como para víctima, este método de resolución del conflicto en un proceso judicial?

En la mediación se trabaja con personas, con sus narrativas y con sus experiencias, tratando de prevenir la reaparición de las mismas conductas delictivas educando al agresor, haciéndole ver que su conducta es constitutiva de delito y, por otro, reparar el daño moral o simbólico causado a la víctima.

¿A qué cree que se debe ese debate social creado en torno a la legislación de la violencia de género?

La evolución que han sufrido las normas penales en relación con la violencia de género y el progresivo reconocimiento, tanto a nivel internacional como nacional, de este tipo de violencia ha sido como consecuencia de un problema social que ha de ser tratado de forma específica y reforzada y que ha derivado en el importantísimo pacto legislativo de todos los partidos políticos para la lucha contra la violencia de género.

¿Son cada vez más necesarios actos como los impulsados por la Unidad para la Igualdad de la UMU para concienciar a una sociedad, sobre todo en edades más tempranas, de la importancia de la lucha contra la violencia de género?

Sí, por supuesto. Es imprescindible educar a la población más joven en la importancia de la lucha contra la violencia de género para que inicien sus primeras relaciones sentimentales teniendo muy claras cuáles son las bases de las mismas.

Esta tarea debe llevarse a cabo desde un mismo punto de partida por parte del legislador y por parte de los educadores, ya sea en un ambiente estudiantil o en aquellos espacios más familiares e íntimos.

¿Qué le diría a aquellas personas que opinan que la celebración del Día Internacional de la Mujer no tiene sentido?

Simplemente les recordaría en qué consiste este día, y es que el 8 de marzo se conmemora la lucha de las mujeres por nuestra participación en la sociedad y por nuestro desarrollo íntegro como personas, en pie de igualdad, sin que haya consistido nunca en una ‘guerra de sexos’.

Para mí, este día es una forma de recordarnos el largo camino que otras mujeres recorrieron por nosotras y que ahora debemos continuar para conseguir una igualdad real y efectiva.

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