Fauna

Cajas nido en zonas verdes para recuperar los autillos en Murcia

Este pequeño búho dejaba oír hace unos años su particular sonido, similar al sonar de un submarino, desde el jardín de Floridablanca hasta el Malecón, pero ahora "prácticamente ha desaparecido"

Colocan una de las cajas nido en un árbol de gran porte de Murcia.

Colocan una de las cajas nido en un árbol de gran porte de Murcia. / AYTO.MURCIA

Alejandro Lorente

Alejandro Lorente

Lo habrán escuchado en alguna ocasión por las noches. Una especie de pitido aflautado acompasado, como el sonar que tienen los submarinos y los barcos, sobre todo durante los meses de primavera y verano. Este particular sonido, que podría confundirse con el que procede de algún tipo de maquinaria, es el que emiten unos pequeños búhos llamados autillos. Estas rapaces nocturnas asentadas en Europa, del tamaño de un mirlo (no suelen superar los 20 centímetros), buscan el calor y suelen emigrar hasta el continente africano cuando aprieta el frío, pero en zonas cálidas como el sureste de España no es raro que permanezcan casi todo el año. Además de por su canto, el búho europeo es conocido también por su plumaje grisáceo o pardo, lo que le permite camuflarse a la perfección entre los árboles, con un mimetismo espectacular. Uno de sus hábitats preferidos, además de sotos fluviales, son los parques urbanos, que reúnen dos condiciones indispensables para ellos: la proliferación de sus presas (insectos como cucarachas o polillas y roedores de pequeño tamaño), y oquedades en los árboles donde anidar. A pesar de su gran utilidad para el control de las plagas, la población de estas aves está disminuyendo en los entornos urbanos de toda España, también en el de Murcia.

La mayoría de los expertos coinciden en señalar algunas de las causas que han arrinconado a este especie: la pérdida de zonas verdes, la siega intensiva, la tala de árboles maduros o los plaguicidas. Tampoco ayuda que siga siendo un ave muy poco estudiada y controlada, de hecho apenas se han realizado censos de población.

Por frenar esta tendencia, el Servicio de Zoonosis del Ayuntamiento de Murcia, dependiente de la Concejalía de Bienestar Social, Familia y Salud, está trabajando en los últimos meses para recuperar la población de autillos. Para ayudar a que esta rapaz vuelva a acompañar a los murcianos y visitantes en las noches de primavera y verano, la Asociación Ulula, en colaboración con la Asociación Sociocultural Cachibache, ha impartido en el Museo de la Ciencia y el Agua de Murcia un taller sobre construcción y colocación de cajas nido para rapaces nocturnas, en el que han participado 20 niños de entre 6 y 12 años.

A través de esta actividad divulgativa, los niños conocieron de primera mano no sólo las características de estas aves, sino también la importancia de conservarlas y el crucial papel biológico que desempeñan controlando poblaciones de insectos y roedores, principalmente. Al finalizar el taller se colocó una de las cajas nido construidas, firmada por todos los participantes en el taller.

Y ahora, según explica a La Opinión la concejala de Bienestar Social y Salud, Pilar Torres, para promover el regreso del autillo al casco urbano, la Asociación Ulula ha colocado, en colaboración con el Centro de Protección Animal y Control de las Zoonosis (Ceproamur) del Ayuntamiento de Murcia, el resto de cavidades artificiales que hicieron los niños que participaron en el curso en varias zonas verdes del municipio.

Los veterinarios de Zoonosis explican que de todas las rapaces nocturnas, el autillo es la más urbanita y solía escucharse en las noches de verano en la plaza de Santo Domingo, en la avenida Alfonso X El Sabio,en el Malecón, el jardín de Floridablanca o en las proximidades de la Merced, «aunque parece que, en los últimos años, ha desaparecido de la ciudad», lamentan estos profesionales.

A pesar de las dificultades, todavía se puede escuchar su inconfundible canto durante los meses más cálidos en zonas alejadas del casco urbano con presencia de arbolado, como en Santo Ángel y La Alberca, localidades situadas a los pies del Parque Regional El Valle-Carrascoy.

En el Libro Rojo de las Aves de España 2021, el autillo europeo está incluido en la categoría de amenaza VU (vulnerable). También aparece citado en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, pero no en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas.

Mapas sonoros y herbazales para promover su conservación

Muchas ciudades españolas se han movilizado en los últimos años en defensa de este búho diminuto. Algunos ayuntamientos, como el de Segovia, han dado un paso más allá y han solicitado la colaboración ciudadana. En este sentido, el Consistorio segoviano pidió hace unos años, en el mes de mayo, a sus vecinos que saliesen a sus terrazas, balcones y ventanas para comprobar si se escuchaba o no el característico silbido que se repite cada dos segundos. Los participantes del proyecto ‘Segovia Suena Autillo’ debían comunicar el resultado de la escucha a través de redes sociales o de un correo electrónico. Esta experiencia, en la que participaron cientos de personas, permitió identificar decenas de lugares y orientó las actuaciones para favorecer su reproducción, creando, por ejemplo, herbazales donde fomentar la presencia de algunos insectos que forman parte de su dieta.