El área de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Murcia tiene identificadas a entre 600 y 700 personas que «no tienen una solución habitacional estable» en el municipio y que están atendidos en los diferentes recursos municipales, como el centro de acogida Jesús Abandonado, entre otros. Así lo aseguró ayer el director de Servicios Sociales, Andrés Duarte, durante la celebración de las jornadas ‘Nuevas iniciativas para la atención integral a personas sin hogar’. Duarte explicó que el Consistorio realiza muestreos cada dos años y que el número de personas sin hogar es bastante estable. Del total, el número de personas que pernoctan en calle «suele ser de entre 15 y 35 personas, según los días», afirma este responsable municipal, que asegura que el perfil de estos individuos ha cambiado mucho en los últimos años.

«Las personas sin hogar hace 15 años eran fundamentalmente transeúntes que se desplazaban de un lugar a otro, hoy el porcentaje más elevado son personas como cualquiera de nosotros, que a partir de la crisis económica de 2008 se han visto en una situación de precariedad absoluta, personas que han perdido sus trabajos, han cerrado sus empresas, y no han podido mantener la vivienda en la que habitualmente residían por no poder pagar las hipotecas o el alquiler», explicó Duarte. 

Por otra parte, el director de Servicios Sociales informó que durante el año 2022, el Ayuntamiento de Murcia emitió 763 informes para la paralización de desahucios. Recordó que ahora hay una moratoria y que cuando acabe habrá que tener en cuenta que en los tribunales de Murcia hay unas 10.000 demandas para desahucios. «Si nosotros no aportamos soluciones de forma inmediata para ir solventando esto, nos podemos ver en una situación verdaderamente dramática», alertó Duarte. 

Para afrontar este contexto, el Ayuntamiento aprobó hace poco una estrategia para combatir el sinhogarismo, que contempla medidas que van desde la prevención hasta la actuación directa. Duarte afirmó que, en virtud de esta estrategia, se están poniendo en marcha iniciativas «bastante novedosas». Como ejemplo, Andrés Duarte citó una acción que consiste en verificar que las personas que llevan más de tres años en la calle tienen más dificultades para su reincorporación social que aquellas que llevan menos de tres meses. También hizo referencia a la iniciativa Housing First, en el que 15 personas se han beneficiado de una vivienda «sin pasar por circuitos previos de albergues o centros de acogida, y estamos presenciando niveles de recuperación elevadísimos». 

La Huertecica

Sobre las protestas en el barrio de San Antolín por el centro que abrirá La Huertecica, Duarte fue taxativo: «No es un centro para drogadictos, es un centro para personas sin hogar con problemas de salud mental; hay muchos adolescentes con problemas de salud mental y a nadie se le ocurre cerrar el instituto». Además, aseguró que los usuarios de ese centro serán seleccionados. «No vamos a buscar a nadie que altere o pueda generar conflicto» y recordó que «salud mental y delincuencia no son sinónimos».